El último italiano que recibió un trofeo de Campeón Mundial es Fabio Cannavaro, un hombre sureño que creció inspirado por Diego Armando Maradona, recorriendo las calles de la vituperada ciudad de Nápoles y se convirtió en un artista de la defensa en el futbol internacional. Fabio, nacido un 13 de septiembre, cumple este domingo 47 años.
La leyenda de este hombre, campeón mundial sobre la Francia de Zinedine Zidane en 2006, se forjó en una región caótica que históricamente ha sido desdeñada por la Italia del norte, que tiene más recursos y desarrollo. Fabio creció en Fuorigrotta, su barrio, un lugar donde tenía que jugar y sobrevivir en la calle, y de ahí aprendió la fortaleza para ser resistente, defenderse, sobrevivir y pensar cuando tenía la pelota en los pies.
Nápoles es además históricamente el lugar de la Camorra, una ciudad emproblemada en donde los niños, a diferencia de la mayoría de Italia, juegan en la calle y miran al Estadio San Paolo, donde Maradona despilfarraba clase sobre el terreno de juego para hacer grande al Napoli mientras Cannavaro era balonero.
Antes, de niño, había visto a través de la televisión cómo Italia ganaba el Mundial de 1982, y también fue recogebalones en la semifinal de 1990 entre Italia y Argentina en Nápoles, cuando Maradona enterró los sueños locales y calificó a la albiceleste a la final en el propio templo que él construyó.
Con esa leyenda como referente, Fabio comenzó su carrera en el Napoli en 1993, pasó por el Parma, Inter, Juventus y Real Madrid. Con la selección de Italia heredó el gafete de capitán del legendario Paolo Maldini y, tras ganar el Mundial de 2006 (donde fue reconocido con el Balón de Plata), obtuvo el Balón de Oro (quinto italiano en lograrlo) y el Jugador Mundial de la FIFA, trofeos tradicionalmente reservados para jugadores ofensivos.
Días antes del Mundial de Alemania explotó el escándalo de Calciopoli y perdió los trofeos que ganó con la Juventus porque el club fue acusado de amaño de partidos. Con el club descendido, Fabio Capello lo llevó al Real Madrid.
Votado también como el futbolista más sexy de Italia, Cannavaro se mostró siempre como un clásico gladiador del Coliseo romano, un muro defensivo que triunfó con su selección, con los equipos donde jugó en el Calcio y regresó los títulos al Real Madrid luego de una sequía de tres años. Se retiró el 9 de julio de 2011, el mismo día en que cinco años antes había ganado el Mundial de Alemania. “He jugado con los mejores de mi tiempo: desde Buffon a Thuram, desde Pirlo a Totti, Del Piero, Baggio, Zola, Maldini”, declaró en aquella ocasión a La Gazzetta dello Sport.