“Dale bo, otra vez me devolves el mate con el agua abajo…”, le dijo el Mota Walter Gargano, en tono de reproche, a su compañero argentino Gabriel Paletta. Aquel no era un día más. En el marco de su centenario, el plantel de Parma de Italia fue llevado a visitar al papa. Y Gargano, como buen uruguayo, se fue con el mate y el termo bajo el brazo.
Mientras aguardaban el ingreso al Vaticano, el Mota cebaba y compartía el amargo con los argentinos del grupo.
Sobre el mediodía, cuando la delegación fue autorizada a ingresar, se inició el acto protocolar. El presidente de Parma tomó la palabra y luego comenzó a entregar regalos al sumo pontífice. Aquel día de febrero de 2014 todo se desarrollaba con normalidad hasta que el papa Francisco rompió el protocolo y sorprendió a Gargano al que le preguntó: “¿Y vos qué hacés?”. El sanducero atinó a responder: “Acá, con el mate. Pero este mate es uruguayo, no argentino”, le comentó en tono de broma. “Solamente un uruguayo es capaz de hacer eso. Tu presidente (en referencia a José Mujica) vino acá con el mate”, le replicó el papa. Y acto seguido preguntó: “¿Usted no me ofrece el mate?”. “Pah cuando me encaró y cuando me dijo eso quedé helado. Estaba con el mate desde las nueve y media de la mañana y lo vimos a las 12.30 del mediodía. ¡Me quería morir!”, comentó Gargano el día que lo entrevisté para El Observador sobre aquella anécdota con el papa Francisco. Ante esto, el Mota no tuvo otra que cebarle un mate al sumo pontífice, a riesgo de que estuviera lavado. “Lo preparé y todo, pero estaba medio lavadito. Se lo tomó igual, un fenómeno” dijo Gargano haciendo alusión a esa especie de pecado imperdonable que significa para un uruguayo darle un mate lavado a otra persona. La historia quedó registrada en un video donde se puede ver al jugador uruguayo y al papa intercambiando palabras. “¿Qué le dije? Lo que me surgió espontáneamente en ese momento: ‘Usted sí que sabe tomar el mate, no dejó agua abajo como varios argentinos", contó Gargano entre risas. Mientras Francisco tomaba el mate la charla se extendió un ratito... “Y ahí salió el tema de la gente sudamericana que estaba en el club, se los presenté a todos y cuando terminó de tomar y me devolvió el mate la delegación empezó a aplaudir como si fuera algo importantísimo que yo le haya dado el mate al papa. Y me marcó eso porque son cosas que te quedan para toda la vida”, dijo Gargano en la nota. El volante, que por entonces jugaba en la Selección Uruguaya, describió su felicidad a través de su cuenta de twitter: “Mate para la historia”, “Inolvidable”, “Felicidad”, expresó Walter Gargano junto a fotografías del papa Francisco bebiendo el mate que le cebó en medio de los nervios. El club Parma subió a su web el video de la visita donde se pudo apreciar el momento en que el papa Francisco sorprende a Gargano pidiéndole un amargo. Por estas horas, donde el mundo está conmovido por el fallecimiento del papa Francisco, muchos se deben preguntar qué hizo el Mota con el mate que compartió con el sumo pontífice. Aquel día, Gargano expresó: “La bombilla y ese mate no se tocan nunca más. Forman parte del museo personal”.