Son tres puntos que valen oro

BUENOS AIRES (DyN) -- Quilmes apovechó un error de Nueva Chicago en el primer tiempo y después se dispuso a defender la diferencia para terminar ganando 1-0 en el sur bonaerense.

El gol de la victoria lo convirtió el atacante Diego Torres en la etapa inicial, luego de una imprecisión de Chicago en la mitad de cancha. De esta manera, los sureños mantienen la fe de al menos jugar una Promoción, mientras que los de Mataderos todavía no consiguieron ganar en el Clausura.

El primer tiempo fue jugado por ambos equipos con los dientes apretados, con mucha marca en el medio y apelando permanentemente a la pierna fuerte.

Los primeros minutos fueron favorables para Quilmes, que eligió atacar al rival por la banda izquierda con las reiteradas subidas de Alvaro Pereira.

A los 11 minutos, Gustavo Ibáñez tomó un balón en la mitad de la cancha luego de una mala salida de Chicago, llegó hasta el fondo de la cancha y tiró un preciso centro que Torres impactó de derecha en el medio del área para definir a un costado del arquero Carlos Navarro Montoya.

A partir de entonces, el equipo local se retrasó en el campo y le cedió la tenencia del balón a Chicago. Pero el equipo de Mataderos, al carecer de profundidad en el área rival, no logró elaborar ninguna chance clara de gol.

El atacante Federico Higuaín nunca pudo hacerse del balón porque estuvo perdido entre los defensores locales y por eso la ofensiva del Torito careció de peso.

En los últimos minutos Quilmes levantó un poco en su rendimiento, pero no gravitó demasiado. La sensación que quedó tras la primera parte fue que ninguno de los dos quiso arriesgar por temor a perder.

El complemento no cambió demasiado. Quilmes cada vez se metía más atrás y Chicago buscaba obligado el empate, pero nunca tuvo inteligencia para quebrar a una férrea defensa local. Los de Alberto Fanesi tampoco aprovecharon los últimos 15 minutos que jugaron con hombre de más, ya que Horacio Cardozo se fue lesionado y el visitante había agotado los cambios.

Chicago tuvo la pelota y probó con algunos remates desde fuera del área. El más peligroso fue un disparo del ingresado Damián Giménez que pasó cerca del palo izquierdo de Damián Grosso. Claro que ese recurso resultó insuficiente.

Por su parte, Quilmes se animó cerca del final cuando tenía supremacía numérica. Carlos Luna se perdió un mano ante Navarro Montoya a los 31 y luego el local se limitó a defender la mínima ventaja.

El balance general del partido da como un justo ganador a Quilmes, porque aprovechó un error del rival y luego defendió a muerte una victoria que le permite todavía soñar en una Promoción para mantener la categoría.

A su vez, Chicago sigue sin rumbo y sin ganar en el torneo y apostará por Carlos Ramacciotti, quien asumirá el lunes a las 17, para tratar de reaccionar antes de que se le acabe el tiempo.