El Barcelona golea al Valladolid

BARCELONA (Jordi Blanco/Corresponsal) -- Ocho de ocho, el Barça camina firme en la Liga sin rival que pueda frenarle. Lo intentó el Valladolid con una buena puesta en escena y un gol que le permitió, por lo menos, arribar al descanso empatado, pero acabó rendido a la evidencia. Sin alcanzar la excelencia, el Barça galopa. Indiscutible.

La noche comenzó caliente en el Camp Nou por el sorprendente desenlace del partido del Real Madrid y se congeló de golpe cuando Javi Guerra volvió a evidenciar las enormes lagunas defensivas del campeón, pero a la que Neymar se puso las pilas y Alexis el turbo, no hizo falta mucho más.

El chileno celebró con un doblete su partido número 60 como azulgrana y el brasileño, disfrazado en la posición habitual del ausente Messi, puso el acento a la remontada.

Martino lanzó dardos al entorno en la víspera ironizando con crisis artificiales y el resultado volvió a dejarle a salvo ante los debates que puedan existir. Si el Barça gana en Pamplona la próxima jornada habrá igualado el record histórico de victorias del Real Madrid. Y ante la estadística, ante los números, cualquier debate, cualquier crítica, pierde por KO.

Se mantiene, sin embargo, una duda existencial en el entorno. A este imparable Barça aún no se le ha cruzado en el camino ningún rival de primer nivel ni en la Liga ni en la Champions. Y el único de tal consideración, el Atlético de Madrid, le arrancó dos empates.

La velocidad de ejecución sigue por debajo de lo esperado de la misma forma que se sigue esperando el juego al primer toque. A la que se ausentan algunas piezas, sin que lo note el resultado lo hace el fútbol.

Si no está Messi, ahí aparece Neymar para tomar el timón. Pero a la que falta Busquets, la ralentización es evidente en la salida de balón. Se notó, de forma evidente, en la primera mitad y lo pagó el Barça marchando a vestuarios sin ventaja.

Pero después cambió el decorado. O asustado o demasiado precavido, el Valladolid dio dos pasos atrás, se olvidó de picar en las contras y a la que Xavi, asistido por Tello, rompió con un sutil remate el empate, el equipo pucelano se rindió.

No había mucho más que decir porque el Barça sin darse cuenta pasó a jugar en terreno contrario con mucha más comodidad que en el primer tiempo y el peligro rondó de manera continuada en la meta de Diego Mariño.

Así, en seis minutos Neymar y Alexis se intercambiaron papeles de asistente y goleador para convertir el triunfo en goleada. Sin mucho más que decir. Con poco más que discutir el Barça alcanzó su octava victoria liguera para responder al Real Madrid y poner presión al Atlético.

El espectáculo, que se vio en cuentagotas, quedó para otro día. Las victorias y los goles (28 en ocho jornadas) son el mejor, de momento, argumento del campeón.