Reencuentro con la red

LISBOA (EFE) -- La selección portuguesa de fútbol saboreó el sábado un triunfo fácil, tras una larga sequía de goles, ante Azerbaiyán al que derrotó 3-0 gracias, sobre todo, a Cristiano Ronaldo, que marcó dos de los tantos y propició el tercero.

Con un dominio casi absoluto del terreno de juego y con sucesivas oportunidades de marcar que no llegaron a cuajar, la selección lusa se lavó la herida del empate ante Finlandia (1-1) con el que debutó en el grupo A de clasificación para la Eurocopa de Austria y Suiza 2008.

El extremo del Manchester United consiguió el primer gol, tras un pase de Deco y de remate con la izquierda, a los 25 minutos y un minuto después consiguió colocar, de un disparo largo, otro balón sobre la meta de Azerbaiyán, pero el árbitro no se lo concedió.

Tras otros cuatro minutos de juego Cristiano Ronaldo lanzó un certero tiro libre directo que permitió a Ricardo Carvalho sortear la defensa y marcar el segundo gol.

En la primera parte destacó también el juego de Simao y un buen pase de Maniche -al que Scolari cambió por Tiago- que acabó en una de las varias ocasiones de aumentar el marcador que no logró aprovechar Portugal.

En la segunda parte, con la selección visitante apabullada, Cristiano Ronaldo logra el tercer y definitivo gol en el minuto 62 tras una jugada de Simao.

Hasta el final del partido los portugueses asediaron constantemente al guardameta contrario, que en el minuto 74 estuvo a punto de ser nuevamente batido por un tiro libre de Deco.

A pocos minutos de concluir el encuentro Ismailov estuvo cerca de conseguir un gol de consolación para su equipo, que falló los contraataques y no supo aprovechar los huecos en defensa de un Portugal que buscó constantemente el gol.

El equipo dirigido por el brasileño Luis Felipe Scolari, que acabó en cuarto lugar en el mundial de Alemania, cumplió su promesa de dar un festival de fútbol al público que acudió al Estadio do Bessa de Oporto, aunque a costa de la escasa capacidad de la selección visitante para reaccionar con éxito.

Azerbaiyán agrega otra derrota a su pobre papel en la fase de clasificación, tras empatar (1-1) contra Kazajistán y perder (1-0) ante la Serbia de Javier Clemente.

En cambio la selección portuguesa, que sólo había logrado dos empates y tres derrotas desde su victoria ante Holanda (1-0) en los octavos de final de Alemania, se mostró en buena forma y exhibió un juego vistoso y bien coordinado.