Alemania goleó a Azerbaiyán

BERLÍN (EFE) -- Alemania hizo el martes sus deberes al golear 6-1 a Azerbaiyán un partido que al principio le dio algún trabajo y que luego dominó con absoluta claridad.

La victoria alemana hubiera podido ser más amplia y el único lunar es un absurdo gol encajado en la segunda parte que sólo tiene un valor estadístico.

El partido empezó como todo el mundo esperaba. Con Alemania atacando y Azerbaiyán metido atrás, defendiéndose permanentemente con ocho o nueve jugadores y al acecho de que la casualidad le permitiese intentar un contragolpe.

El seleccionador alemán, Joachim Löw, había dicho que el planteamiento defensivo podía resultar problemático y que la clave para liberarse era lograr un gol tempranero. Y ese gol no llegó.

Alemania atacó desde el comienzo, tratando siempre de llegar jugando y sin recurrir a pelotazos pero no sólo el gol, sino también las ocasiones, tardaron en llegar.

Incluso en el minuto 10 los alemanes se llevaron un susto en un contragolpe en momentos en que estaba con diez hombres que tuvo que ser sustituido por un corte en el rostro producido por un codazo de un contrario.

Las ocasiones sólo empezaron a llegar después del minuto 20. Lukas Podolski estuvo cerca de marcar en el 23 y en el 25 y, en el 26, el meta azerbaiyano, Agayev, reaccionó con una gran parada ante un cabezazo de Heiko Westermann.

El propio Westermann fue el encargado de abrir el marcador en el minuto 28, con un disparo desde cinco metros tras recibir un pase de Miroslav Klose que estaba de espaldas a la portería.

El partido, sin embargo, siguió en la misma tónica tras el gol de Westermann. Alemania atacaba con insistencia y sin desesperación y Azerbaiyán se defendía en bloque y con ello estuvo a punto de irse al descanso perdiendo sólo por 1-0.

En el 45, sin embargo, Podolski logró el segundo, tras una combinación con el madridista Mesut Özil. Y en el descuento vino el tercero que marcó Klose a centro de Podolski tras una jugada iniciada por el defensa Holger Badstuber.

En el segundo tiempo, con el 3-0 a favor, Alemania salió completamente liberada y empezó a producir ocasiones en serie, En el 48, Philipp Lahm estuvo muy cerca de marcar, luego Sami Khedira tuvo el cuarto en sus pies en el 50 y un minuto más tarde Thomas Müller disparó ligeramente desviado tras un gran pase de Klose.

El cuarto gol llegó, en el 53, cuando un centro de Khedira pegó en el cuerpo de Sadygov y se fue en el fondo de la red.

Alemania había empezado a divertirse, e intentaba llegar con combinaciones bastante elaboradas y el partido hubiera seguido siendo la historia de un asedio de no ser porque en el minuto 56, en una jugada fortuita y cercana al absurdo, Azerbaiyán logró el descuento.

En un saque de esquina, producto de uno de los pocos ataques del equipo visitante, el meta Manuel Neuer despejó mal una pelota que pegó en el cuerpo de Melikov que estaba de espaldas y probablemente ni siquiera vio que el balón se iba al fondo de la red.

Pese a ello, Alemania siguió jugando igual y generando ocasiones, El quinto llegó, con un cabezazo de Badstuber en el 86 y en el descuento Klose hizo el sexto. Hubieran podido ser más. Pero hoy Alemania pareció más interesada en gustar que en golear aunque al final haya logrado las dos cosas.