Gales derrotó a Chipre y mantiene vivo su sueño

MADRID -- La selección de Gales mantiene muy vivo su sueño de lograr por primera vez la clasificación para la fase final de una Eurocopa, tras imponerse este lunes por 2-1 a Chipre, un triunfo que permite a los de Chris Coleman conservar la primera plaza del grupo B.

En el triunfo galés volvió a jugar un papel determinante el futbolista del Real Madrid Gareth Bale, que, pese a no marcar, protagonizó las mejores acciones del encuentro.

Como el espectacular taconazo que permitió a los 23 minutos de juego al centrocampista Hal Robson-Kanu plantarse solo ante el portero chipriota Tasos Kissas para establecer el 2-0 para los locales.

Ese gol hacía pensar en una cómoda victoria para los galeses que, sin embargo, se complicaron la contienda con un clamoroso error del guardameta Wayne Hennessey, incapaz de despejar a los 36 minutos una falta lateral botada por Vincent Laban, que acabó convirtiéndose en el 2-1 para los chipriotas.

Los apuros se agravaron para los locales en la segunda mitad con la expulsión a los 47 minutos del centrocampista Andy King, que vio la cartulina roja directa por una durísima entrada sobre Constantinos Makridis.

Es expulsión dejó el destino de Gales en las botas de Gareth Bale, que a punto estuvo de firmar a los 69 minutos el tercer tanto local, con un remate escorado que, pese a que se coló por debajo de las piernas del portero chipriota, acabó marchándose fuera de la portería.

La fortuna no acompañó a Bale, que ya en el minuto 40 de la primera parte se encontró con el larguero, tras un sensacional lanzamiento de falta.

Es falta de acierto no mermó la explosión de alegría que se vivió sobre el césped del Cardiff City Stadium tras el pitido final, porque Gales, con estos tres puntos, ve más factible que nunca la posibilidad de estar por vez primera en la fase final de una gran competición internacional.