- Nacho Scocco - 9', 14', 19', 46', 58'
- Enzo Pérez - 36', 67'
- Ignacio Fernández - 53'
River aplastó a Wilstermann, dio vuelta la serie y pasó a semi
Cinco goles de Ignacio Scocco, remontada, goleada escandalosa, boleto a las semifinales de la Copa Libertadores y un Monumental vibrando de pasión fue lo que dejó este jueves la paliza de River Plate por 8-0 a un Jorge Wilstermann boliviano que nunca apareció en la cancha.
River Plate se medirá en las semifinales con el mejor de la serie argentina entre los también argentinos Lanús y San Lorenzo. En la ida, el 'Ciclón' se impuso como local por 2-0.
El equipo boliviano que dirige el peruano Roberto Mosquera venía confiado y creyendo en la clasificación tras el triunfo por 3-0 en el partido de ida de los cuartos de final que se disputó el pasado jueves en el estadio Félix Capriles, de Cochabamba, situado a 2.558 metros de altitud.
Pero no fue así. El pánico escénico, la confianza en el resultado del primer partido y la fuerza con la que River Plate salió a la cancha de juego fueron la combinación perfecta para que el Millo se sacara la decepción de la derrota de la ida y aplastara a los bolivianos.
El rosario de goles tuvo dos tiempos de cuatro goles cada uno en los que los de Marcelo Gallardo anotaron cada vez que se decidieron y los bolivianos vieron jugar impávidos.
Los goles de Ignacio Scocco salieron en los minutos 8, 13, 19, 46 y 57. Un doblete aportó Enzo Pérez en los minutos 35 y 57, y un tanto de Ignacio Fernández en el 52 marcaron la escandalosa goleada propinada a los bolivianos
El comienzo fue a pura orquesta para River con un Scocco que niveló la serie en apenas 19 minutos con sus tres conquistas.
Primero al minuto 8 ganó en velocidad y, tras eludir en velocidad al portero Raúl Olivares, tocó a la red sin problemas.
Poco tardó el 'Millonario' en ampliar su ventaja en el partido porque cuando el reloj marcaba 13 minutos el propio Scocco se fue cerrando de izquierda a derecha y con un soberbio disparo con su pierna derecha venció la resistencia de Olivares.
El tercero fue un centro rasante que ensayó Scocco desde un ángulo muy cerrado que no encontró el desvío de ningún compañero y se metió contra el segundo palo de la portería del equipo boliviano.
Con la serie igualada, River se tomó un respiro para pasar al frente y por primera vez sentir que la epopeya de revertir el resultado de Cochabamba era posible.
Al minuto 35 fue el propio Scocco que ensayó un pase recortado preciso para que Enzo Pérez de frente definiera con frialdad y certeza.
En el segundo tiempo, River golpeó al minuto y definió la serie con un nuevo desborde por la derecha que terminó con un centro atrás de Auzqui para el cuarto de Scocco con el arco vacío.
Wilstermann no encontraba ningún tipo de reacción y al tiempo de asimilar un golpe recibía otro.
Y fue así como un nuevo centro atrás de Montiel fue despejado por el defensa Da Silva pero el rebote le quedó a Ignacio Fernández que, colocó un exquisito remate que dejó sin reacción al portero Olivares y marcó el sexto de la cuenta.
En el minuto 57 un rebote tras un tiro de esquina le volvió a quedar a Scocco que con un sutil toque marcó el quinto de su cuenta personal y el séptimo de un conjunto argentino que no aflojaba su marcha.
El broche de oro llegó al minuto 66 con una corrida desde su área a balón controlado de Enzo Pérez que definió con gran categoría tras superar en velocidad a los dos defensas centrales y picar el balón ante la salida de Olivares.
El resto del encuentro fue un trámite hasta que el chileno Julio Bascuñán decretó el final del encuentro y la clasificación de River a las semifinales de la Copa Libertadores, con la ilusión de lograr su cuarta corona tras las logradas en 1986, 1996 y 2015.
Para Jorge Wilstermann la tristeza de haber desperdiciado una oportunidad histórica tras el triunfo por 3-0 en Cochabamba y ahora el consuelo de intentar conquistar el título del campeonato boliviano donde marcha líder.