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El apellido Quiñones, que ha sido recurrente en Lobos BUAP por goles e indisciplinas, esta tarde se hizo presente en el Estadio Universitario BUAP; no por el goleador local, sino por el que causó baja y ahora es 'diablo': Luis Quiñones.

Una indisciplina separó de las canchas al colombiano por cuatro meses y los mexiqueneses le dieron una segunda oportunidad. Y consumó su venganza con doblete.

Apenas al minuto diez, el cafetalero se botó, cedió de taquito, le devolvieron el gesto y entró al área para clavar el primero de la tarde. Con su mano derecha hizo un gesto de teléfono, le pasó por delante a Rafael Puente del Río y celebró con la banca escarlata.

Los locales no supieron como reaccionar; tuvieron la pelota durante gran parte del partido, sin embargo, en territorio contrario nunca supieron cómo hacer daño. En cambio, Toluca aprovechó los espacios y con contragolpes fueron más peligrosos.

Y aunque Toluca no fue contundente en tres ocasiones, sacó provecho de que sus rivales estuvieron mal colocados y tras una diagonal de Pedro Canelo, el Quiñones que Lobos no quiso volvió a aparecer para empujar la bola y ser más mesurado en su festejo al darle crédito a su compañero por el servicio.

El homónimo de Luis, en la recta final del encuentro, se hizo presente para darle esperanzas a los poblanos al empujar la pelota. Sin embargo, no fue suficiente.

Con esto, Toluca es líder de la tabla general y Lobos BUAP continuará su búsqueda de siete puntos para salvarse del descenso, a falta de cuatro jornadas.