Monterrey ahogó la visita de Tijuana a su cancha

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Rayados de Monterrey se impuso ante Xolos de Tijuana por 3 a 0 este sábado en la cancha del Estadio BBVA, que se vio afectada severamente por una fuerte lluvia que estuvo presente sobre el recinto durante todo el duelo.

Con la victoria en esta fecha 11 del Apertura 2018, Monterrey llega a 20 puntos y sube del séptimo lugar al cuarto; Xolos, en tanto, se queda en 15 y se aleja más de la zona de calificación.

Rayados entendió mejor las condiciones del terreno de juego y aprovecharon los contragolpes para pasarle por encima a los tijuananes, que arrancaron bien pero no consiguieron reflejarlo en el marcador.

La primera anotación la realizó Rogelio Funes Mori, que avanzó por el área grande, burló a un rival y cruzó su disparo, que rebotó en un poste y se metió a la portería defendida por Gibrán Lajud.

La lluvia seguía fuerte, pero todavía no influía en el rodar del esférico. El desgaste físico estaba siendo mayor, pero Xolos no se achicó. Siguió insistiendo en acercamientos, pero sus acciones no le llevaron a igualar el marcador, por lo que se fue al descanso en desventaja.

Se apaciguó el agua en el reinicio, pero de inmediato la situación obró en contra de los visitantes. Al 54’ el árbitro Jonathan Hernández Juárez marcó falta en el área. Miler Bolaños y Diego Rodríguez terminaron trabando a Dorlan Pabón y el penalti fue sentenciado. Al 56’, el defensa y goleador Nicolás Sánchez hizo una excelente ejecución y marcó el 2-0.

La tormenta arreció nuevamente y superó la capacidad de drenaje de la cancha y en cuestión de minutos su estado fue factor para el juego.

Al 74’, el gol de Gallardo se dio porque el balón se detuvo en un charco, tras el servicio de Pabón. Eso dio tiempo para que el anotador llegara antes a él que Lajud, quien había salido a achicar, y el 3-0 cayó sin remedio.

El marcador era pesado y no reflejaba lo que cada equipo estaba haciendo en el campo; la fortuna de Monterrey era visible, en tanto que el esfuerzo de Xolos no rindió frutos.

Ante la inamovilidad de la tormenta, el colegiado decidió suspender el juego al '84 y de esta forma darlo por concluido sin la necesidad de jugar los minutos resntanes en otra ocasión.