Barça se da un festín con el Huesca

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BARCELONA (Jordi Blanco, corresponsal)-- El FC Barcelona le arrebató al Real Madrid el liderato de la Liga gracias a la diferencia de goles después de aplastar a un atrevido pero inocente Huesca, que asustó de entrada con el gol del Cucho Hernández en su primer remate a puerta y acabó arrodillado ante la avalancha ofensiva del campeón, que le destrozó con un 8-2 que no dejó lugar a la duda.

Bajo el liderazgo de Messi para remontar al principio y empujado por un fenomenal Jordi Alba, asistente de dos goles y autor de otro, que respondió con bestialidad a la no convocatoria de Luis Enrique en la selección española, el Barcelona asaltó el primer puesto del campeonato ofreciendo una imagen tan solvente como despierta. Bien en rapidez, mejor en combinación y fantástico en remate. Ante todo ello, los problemas sufridos en defensa quedaron en un muy segundo plano.

El Huesca, que en su anterior y única visita al Camp Nou, en diciembre de 2014, se llevó un inapelable 8-1 en Copa del Rey, sufrió nuevamente la ira azulgrana. En aquella ocasión jugaba en 2ªB y hasta cierto punto se entendió lógico el aplastamiento... Tal como este domingo, en su estreno como equipo de la máxima categoría pero muy alejado en todos los órdenes de un campeón que al ritmo de Leo Messi pasó del susto a la goleada.

Y al liderato en lo que comienza, apenas comenzada la temporada, a sospecharse un mano a mano con el Real Madrid a la vista de los tropiezos de unos outsiders (Atlético y Valencia) que no han respondido a la exigencia esperada.

Se despistó Piqué, anduvo fuera de sitio Umtiti y mostró lagunas preocupantes la defensa del Barça, tanto en el madrugador 0-1 como en el 3-2 logrado por Alex Gallar cerca del descanso... Pero como si fuera trasladándose en el tiempo y tomando aquella máxima de Johan Cruyff de buscar más goles que el contrario, el campeón se aplicó en el juego ofensivo, se puso a las órdenes de Messi, buscó los espacios y trasladó al marcador la realidad del césped.

Igualó el Barcelona apenas traspasado el cuarto de hora en un pase de Rakitic a Leo que se definió con un durísimo disparo cruzado, con la derecha y desde el lado diestro del área y ocho minutos después la ventaja ya era local, cuando Jordi Alba, un puñal por su banda, alcanzó la línea de fondo para centrar y encontrarse con la ayuda involuntaria de Jorge Pulido, que se marcó en propia puerta.

SIN OPCIÓN

Rompió poco después su sequía de 419 minutos sin marcar Luis Suárez remachando a placer una magnífica asistencia del propio Alba, que respondió de manera contundente a Luis Enrique mostrando que sigue siendo a pesar de todo el lateral zurdo por antonomasia del fútbol español y aunque Gallar condujo el

partido al descanso con un ajustado 3-2, lo que vino después fue ya un monólogo azulgrana sin más discusión.

Y es que el equipo de Valverde huyó de confianzas de ningún tipo y reapareció en el césped en modo aplastamiento. Dembélé, con un excelente disparo cruzado, y Rakitic, con una volea sensacional, llevaron el 5-2 al marcador en apenas siete minutos de juego en el segundo acto y a la que quiso darse cuenta, el Huesca ya estaba derrumbado en todas las facetas.

Marcó Messi a pase de Coutinho y redondeó su exhibición Jordi Alba, a pase de un capitán que marcó y asistió a pares para seguir siendo el alma de un equipo al que Valverde no dio frescura hasta que el resultado estaba ya sentenciado y la goleada era un hecho.

Entró Lenglet, que no había jugado en Valladolid, y se quedó en el banquillo Malcom cuando, después, ingresaron consecutivamente Arturo Vidal y Arthur (también sin minutos en Zorrilla). De momento, se demuestra, el Barça sigue en manos del equipo de la pasada temporada... Comenzando la actual en modo total.

Se cerró la tarde, en tiempo añadido, con un penalti sufrido por Suárez y que el propio uruguayo transformó para el 8-2 definitivo. Una goleada bestial para un Barça que respondió al Real Madrid con una contundencia indiscutible.