Bordagaray le dio el triunfo 1-0 a San Lorenzo en Tucumán, ante Atlético

SAN MIGUEL DE TUCUMAN (DyN) -- San Lorenzo de Almagro tuvo en la noche del sábado oficio y por eso se volvió dulce de San Miguel de Tucumán donde venció a Atlético 1-0 por la fecha inicial del torneo Clausura.

Fabián Bordagaray, el delantero que se ganó la confianza de Diego Simeone y hasta heredó el número 14 que fue el preferido del actual entrenador durante su extensa y exitosa etapa como futbolista, marcó el único gol a los 24 minutos del primer tiempo.

Bordagaray recogió un rebote en la parte superior de un poste para batir a Lucas Ischuk y poner el 1-0 que se tornó ireversible. El remate original lo había enviado Alejandro Gómez.

Para los tucumanos este revés resulta por demás preocupante, porque les dio alcance Chacarita Juniors en la tabla de los promedios. Si la competencia concluyera así, Decanos y Funebreros deberían medirse para determinar cuál va a la Promoción y cuál, al descenso directo. El comienzo fue alentador para Atlético, que dispuso del aliento de su público.

De todos modos, a pesar de tener la pelota, poco a poco se diluyó el dominio de los anfitriones.

San Lorenzo se afirmó por la tarea eficaz de Cristian Leiva en la mitad de la cancha. Así se anuló la creatividad de Claudio Sarría, quien tenía la misión de abastecer de fútbol a los tucumanos. También fue importante para los azulgranas el desempeño del uruguayo Pablo Pintos con sus desbordes por la derecha.

En la primera llegada neta del Ciclón, Gómez tiró desde la izquierda pasado, la pelota pegó en el segundo palo y Bordagaray atento llegó primero que todos al rebote y convirtió.

Juan Pablo Pereyra se perdió el empate frente a Pablo Migliore porque no alcanzó a concectar de cabeza, pero el conjunto del Cholo prevaleció con justicia en esa etapa primaria del encuentro por la mayor categoría de sus futbolistas.

En la segunda parte, con el ingreso de Sebastián Longo Atlético procuró ser menos vulnerable y, en otra medida dispuesta por Osvaldo Sosa, Pereyra se retrasó para ayudarle a Sarría en la creación.

Chiche Sosa siguió moviendo el tablero en la búsqueda de soluciones, pero todo fue insuficiente porque San Lorenzo estuvo firme y sólido, siempre con Leiva como factor de equilibrio y figura de la cancha.