Zaragoza sale del descenso y mete al Depor en lucha por permanencia

ZARAGOZA -- Real Zaragoza, con su victoria sobre el Deportivo de La Coruña, logró salir del descenso en una jornada propicia porque, además, su triunfo involucra en la lucha por la permanencia a varios de los equipos que tenía por encima en la tabla clasificatoria, entre ellos al conjunto gallego.

En un partido sin excelencias futbolísticas el equipo aragonés fue capaz de aprovechar el factor campo, y el hecho de adelantarse en el marcador, para sumar su segunda victoria consecutiva en casa que le sirve para escapar del descenso y coger aire frente a un Deportivo que tampoco dio muestras de andar muy sobrado y que, con la derrota, pasa a luchar directamente por no bajar de categoría.

Deportivo se hizo de inicio dueño del balón ante un conjunto local que las pocas veces que lo recuperaba lo perdía con facilidad.

Sin embargo, su rival tocaba y tocaba el esférico pero sin ninguna profundidad por lo que era una posesión estéril y que no creaba peligro.

El conjunto maño era incapaz de trenzar una jugada y acabarla porque se mostraba tremendamente impreciso en los pases, incluso en los más sencillos.

Con estas perspectivas las aproximaciones al área rival fueron prácticamente testimoniales en ambos bandos y ninguno de los porteros intervino.

En el bando local la mejor opción de marcar fue una internada del lateral izquierdo Ivan Obradovic, en el minuto 12, que llegó hasta la línea de fondo y dio "el pase de la muerte" pero donde no había ningún compañero.

En el conjunto de Miguel Angel Lotina era el delantero Adrián, en el minuto 14, recibió un balón cerca de la portería pero esquinado y el meta local, Leo Franco, consiguió meter la mano y conjurar el peligro.

Cuando parecía que la primera mitad iba a terminar con el marcador inicial una falta innecesaria, cometida cerca del área sobre Said Boutahar, porque ya había soltado el balón cuando recibió la patada, propició que los hombres de Javier Aguirre inauguraran el marcador.

El propio jugador holandés botó la falta que golpeó en la barrera y engañó al cancerbero del Deportivo, Daniel Aranzubía, para alojarse mansamente en las redes de su portería en el único disparo entre los tres palos de cualquiera de los dos equipos en los primeros 45 minutos.

Tras el descanso, un Zaragoza crecido comenzó dominando pero poco a poco el equipo gallego equilibró el juego avanzando a sus dos laterales, aunque el conjunto maño estaba bien situado e impedía cualquier aproximación a la meta de Leo Franco.

De hecho, el Deportivo no remató ni una sola vez a la puerta maña donde el argentino Leo Franco fue un mero espectador y únicamente llegó a inquietar ligeramente en alguna falta colgada al área en busca de un rematador que nunca llegó.