'Pescadito' Valencia fue recibido como héroe en Lerdo, Durango, quien regaló la medalla de campeón a su abuelo
Alex ‘Pescadito’ Valencia regresó como campeón Sub-17 de la Concacaf al barrio de Las Flores en Lerdo, Durango, zona que, por temas sociales, es conocida como la ‘Calle del Crimen’, misma que preparó una fiesta para recibir al canterano de Santos, una de las personas más conocidas y más queridas de dicha demarcación, donde, durante la madrugada del pasado martes 28 de febrero, hubo música, juego de luces, baile y hasta lágrimas de felicidad al ver al juvenil volver con una medalla que terminó en el cuello del abuelo del futbolista.
El vuelo del ‘Pescadito’ Valencia estaba pactado para que aterrizara a las nueve de la noche del lunes 27 de febrero, pero sufrió un retraso y terminó por llegar a la ‘Calle del Crimen’, su barrio, en los primeros minutos del martes 28, donde cientos de personas, a pesar de la hora, lo esperaban para darle la bienvenida, luego del campeonato Sub-17 de la Concacaf que consiguió con la Selección Mexicana.
Carlos Escandón, dueño de la academia ‘Charly Soccer’, donde se formó el ‘Pescadito', fue el encargado de recoger a Alex Valencia, quien desde que pisó la ‘Calle del Crimen’ detonó la fiesta.
"El ‘Pescadito’ vive en mero en medio de la ‘Calle del Crimen’, el barrio Las Flores, son unos barrios pesadísimos, pero ahí donde vive el ‘Pescado’ está fuerte", recuerda Escandón.
Los niños, quienes tienen como ídolo al 'Pescadito' Valencia, fueron los primeros que lo recibieron, pues de inmediato corrieron a abrazar al canterano de Santos, quien aún vestía el pants guinda de concentración de la Selección Mexicana, además de una gorra verde del Tri y en el cuello portaba con orgullo la medalla del campeonato.
Entre los abrazos de los niños y los vecinos que salieron a sus puertas para saludarlo, el ‘Pescadito’ Valencia caminó hasta llegar a su casa, donde estaba el grueso de la gente, además de una bocina y un juego de luces, quienes de inmediato lo recibieron con una porra y con el grito de “sí se pudo, sí se pudo”, mientras que el futbolista se detenía para estrechar la mano y posar para las fotos con las personas que se le acercaban, incluso algunas de ellas portaban la playera de la Selección Mexicana con el dorsal ‘16’, número que usó Alex en el Premundial de la Concacaf, aunque presumieron su jersey de Santos.
Las porras hacia el ‘Pescadito’ Valencia pararon hasta que el futbolista se reencontró con su mamá, uno de los momentos más emotivos de la noche, en el que incluso algunas personas no pudieron contener el llanto.
El campeón Sub-17 de la Concacaf pasó a saludar a cada uno de los presentes, hasta que llegó otro momento que conmovió a sus vecinos cuando el ‘Pescadito’ Valencia se quitó la medalla para colgarla en el cuello de su abuelo, quien de inmediato la levantó para presumirla, pero no aguantó la emoción y comenzó a llorar ante los gritos de los presentes.
Una vez que el jugador de Santos terminó de saludar y de posar para fotos con la mayoría de las personas, el encargado del sonido invitó al ‘Pescadito’ Valencia a tomar el micrófono para darle unas palabras a los vecinos, en especial a los niños que lo ven como un ejemplo.
“Primero que nada, muchas gracias. Siempre llevo al barrio a donde quiera que vaya, a mi ‘Charly’, que siempre me está apoyando, a mi familia y pues a todos los del barrio, a todos los que están aquí y pues aquí estamos. Pura ‘Calle del Crimen’, ya saben”, fueron las palabras del ‘Pescadito’ Valencia, misma que nuevamente detonaron la algarabía en el barrio de Las Flores.
Aquella madrugada del 28 de febrero, gracias al ‘Pescadito’ Valencia y al campeonato Sub-17 de la Concacaf que consiguió la Selección Mexicana, la ‘Calle del Crimen’ durmió en un ambiente festivo, atrás quedaron los por las que el barrio de las Flores se ganó dicho sobrenombre.
“El ‘Pez’ es un futbolista en peligro de extinción porque ya no hay jugadores de barrio”, enfatiza Carlos Escandón, quien tuvo al ‘Pescadito’ Valencia desde los seis años en su academia ‘Charly Soccer’, de donde también salió Uriel Antuna y que incluso salió de aquella fiesta de la 'Calle del Crimen' con la playera con el dorsal '16' de la selección mexicana, que le regaló Alex.