El sociólogo uruguayo y docente en la Universidad de la República (UDELAR), Pablo Hein, reflexionó sobre la muerte del futbolista Santiago "Morro" García. El integrante del Grupo de Comprensión y Prevención de conducta suicida analizó el contexto social y aseguró que en Uruguay falta mucho trabajo para atender mejor esta problemática.
Hein conversó con el programa Derechos Exclusivos (Radio Uruguay 1050 AM), aseguró que no es la persona pertinente para analizar el caso específico de García y puntualizó algunas cuestiones para problematizar mejor este flagelo.
“Hay dos o tres cosas importantes que hay que tener presentes para entrar en este tema, el primero que este es un tema que sucede, sucedió y sucederá en Uruguay y en el mundo, y podemos agregar que Uruguay está haciendo muy poco por estos temas, en otros países sí están tratando esto desde una base un poco más amplia que de la salud mental, eso es una apuesta a largo plazo esto también, no es un tema de hacer políticas hoy y mañana tener una solución”, manifestó el sociólogo, quien contó que en cierta oportunidad le compró la camiseta de Godoy Cruz a su hijo hincha de Nacional y que en la tienda del club mendocino le destacaron el valor humano del ‘Morro’.
El sociólogo sostuvo: “Llama la atención que en Uruguay lo focalicemos en la Salud Mental; la Salud Mental y la depresión sí son factores de riesgo importantes, pero no son los únicos. De alguna manera los suicidios son resoluciones o reacciones a conflictos emocionales de la vida cotidiana, interpersonales, familiares, laborales que algunas personas lo resuelven de esa manera”.
“Entonces de cierta forma debemos empezar a educar a nuestros menores, y digo menores porque lamentablemente nosotros ya fuimos educados con esta matriz en el sentido de que esto sea una posibilidad de resolver los problemas, tenemos que educar a nuestros menores en esas habilidades para afrontar esta vida de hiperactividad, hiperinformación e hipersensibilidad para que puedan valerse por sí mismos y con la ayuda de sus allegados, amigos y familiares para afrontar aquellas pequeñas dificultades”, comentó Hein.
“A veces tenemos ciertas actitudes que en algunas personas van generando una carga muy importante de afrontar. En definitiva, todos los problemas de salud mental tienen su base social, cultural y en las emociones, empecemos a buscar ahí”, aseguró y explicó que se ha demostrado que el ‘tapar el tema’ no fue una solución, pero que debería hablarse esta problemática siempre en un determinado contexto: “No es que hay que despertarse y escuchar ‘hoy tenemos 20 grados y se suicidaron cuatro personas’, el tema es ponerlo como un problema social a todo nivel”.
Hein manifestó que para él sería fundamental enseñarle a los gurises que hay más fracasos que éxitos en la vida, y que los fracasos también hay que contarlos y contextualizarlos: “Por ejemplo la primera medida del Programa de prevención de conducta suicida del país vasco es la transmisión de valores culturales y socialmente solidarios, empezar a tejer una sociedad más humana. Hoy es una sociedad de inmediatez donde la gente se evalúa a través de los éxitos, y la vida también está compuesta de fracasos”.
“Para ser más claro digo: yo si era el Morro capaz que tomaba la misma puerta porque fuimos formados así, fuimos formados para contar los éxitos”, afirmó.
El profesional también indicó: “Hay que integrar a este conjunto del tema suicidio otra plataforma de lo que es la felicidad de los seres humanos, las emociones, los dolores. En una encuesta en España el dolor a la muerte es el segundo dolor mencionado en una encuesta muy representativa, con esto quiero decir que los familiares y amigos de Santiago y de los dos suicidios que tuvimos después de Santiago en Uruguay están sintiendo un dolor y un estigma muy profundo que se lo autoimponemos nosotros también para sentirnos cómodos, porque el hablar de locura o enfermedad mental encapsula el tema no solo en la salud mental, sino que nos libra a todos nosotros y entonces el problema es de la psicología y la psiquiatría y no es un tema social, pero no, también es un tema social”.
Y graficó: “Esto es un partido que Uruguay debe sacar la pelota del área, sacarla a pelotazos para que llegue a la mitad de la cancha y que ahí la manejen los profesores, profes de educación física, los comunicadores; tenemos que empezar a tener la pelota para que no llegue al área, porque llega al área y el arquero, que son los psicólogos y psiquiatras, no puede más”.
“El psiquiatra o el psicólogo a veces llegan cuando ya está la pelota ahí; nosotros a veces decimos para tomar conciencia que los suicidios del año que viene y el siguiente ya están un poco predeterminados porque son de la matriz en donde nos criamos, y son las cosas que ya le hicimos a la gente hoy o ayer”, agregó.
Hein destacó que también se debería avanzar más en el trabajo de la posvención con la familia y los amigos del suicida (como lo está haciendo la sociedad chilena), y puntualizó sobre este caso particular: “Envío mis condolencias a Claudia (madre del 'Morro') y a toda su familia y me parece que como posvención deberíamos no quedarnos en la situación de Santiago, que nos sirva para todos y saber que la única puerta que le dejamos a Santiago es la que tomó y esa puerta se la construimos todos, no solo el club sino toda la sociedad desde que Santiago empezó a jugar al fútbol, desde que Santiago ingresó al sistema educativo, de alguna manera es la puerta que le dejamos; en ese sentido tenemos que trascender esto que nos dejó Santiago y decirle a la juventud que este no es el camino, que hay otras maneras, pero para eso debemos formar”.
Por último, el sociólogo recomendó el informe sobre suicidio juvenil de Argentina hecho por Unicef: “Es un gran trabajo donde está contemplada la problemática desde y para los jóvenes, desde una mirada cualitativa y de qué sociedad estamos, qué le pedimos a la juventud y qué no le damos”.
“Todo parte de una interpretación de las cosas que debería cambiarse a edades tempranas. Es un tema complejo, de muchas aristas. Hay que empezar a charlarlo lentamente, tener ciertos espacios, tampoco muy asiduos. Europa está con una campaña muy intensa desde hace unos años y logró buenos resultados. El aumento de este flagelo es a nivel mundial porque hay un cambio a nivel mundial y a veces en ese cambio no nos encontramos bien, no es sólo un problema del fútbol”, dijo el sociólogo que a su vez valoró la importancia de los clubes al generar vínculos que se transforman en un sistema de protección.