Eduardo Espinel, Director Técnico de Plaza Colonia, habló en Radio 1130 AM sobre la derrota del conjunto Patablanca en la definición del Campeonato Uruguayo ante Peñarol.
Sobre el partido de 120 minutos, el entrenador aseguró que “uno va con una idea de planificar un partido adentro del campo que creo que nos salió a la perfección. Queríamos un partido largo, hicimos una estrategia en el partido previo de reservar jugadores porque veíamos en el horizonte esta definición y Peñarol iba a hacer el desgaste para coronarse campeón del Clausura. Creo que terminamos con más oxígeno nosotros”.
Posteriormente se refirió a la definición por penales y su decisión de no mirar las ejecuciones: “No lo tenía pensado. No miré el de Renzo en el partido porque me imaginé que tenía parte de la familia en la tribuna y los miraba buscando una energía positiva. Cuando los hinchas de Plaza gritaban gol, era gol, y ahí iba viendo, pero no después tampoco miré ningún penal. Como no miré el de Renzo y lo hizo después seguí tomando esa opción”.
Consultado por la decisión de que Cristian “Cebolla” Rodríguez no ejecutara ninguno de los 9 penales, teniendo antecedentes muy positivos en ese rubro, Espinel dijo que “hicimos la lista inmediatamente de acuerdo a nuestra visión y pensamiento, lo que era mejor para el equipo y para cada jugador. Hicimos la lista del 1 al 11 y a nosotros nadie nos dijo que no pateaba o que quería patear los penales, fue una decisión nuestra. Si seguía la tanda, el décimo en la lista era el Cebolla y después seguía Santiago Mele”.
Sobre los comentarios que se dieron en las últimas horas al respecto, el DT agregó que “todo esto es un poco un circo y empezaron a decir que el Cebolla pidió no patear. Yo tengo la espalda suficiente en Plaza Colonia como para tomar las decisiones que a mí se me antojan y no toleraría que ninguno me imponga, independientemente del nombre que tenga. A nivel futbolístico, dentro del campo de juego, las decisiones las tomo yo. Creo que me avala un poco la trayectoria en el club, y desmiento totalmente que el Cebolla me haya dicho que no quería patear”.