Se trata de hinchas pertenecientes a los grupos ultras conocidos como "Irriducibili" y la "Banda de 'Noantri", que ya en otras ocasiones participaron en episodios análogos.

A los hinchas se le imputan delitos de violencia y daños personales y se les ha prohibido asistir a encuentros deportivos.

Los hechos que les llevarán a la cárcel ocurrieron en la estación de Santa María Novella, en el centro de la capital toscana, donde coincidieron por casualidad varios centenares de hinchas del Lazio y del Fiorentina.

Los hinchas del Lazio, 150, viajaban en un tren con destino a Verona, donde el club romano jugaba al día siguiente, y que hizo escala en la estación florentina.

En la estación esperaban varios centenares de "tifosi" del Fiorentina, que estaban a punto de subir a un tren con destino a la cercana Lucca, donde jugaba ese día el club toscano.

Nada más verse, empezaron a insultarse y de las palabras pasaron a los hechos: comenzaron a tirarse piedras y a pegarse con cinturones y palos.

La trifulca se saldó con numerosos heridos y cuantiosos daños materiales (todos los cristales de las ventanas de los dos trenes quedaron prácticamente hechos añicos).