El emparejamiento de dos de los equipos más prestigiosos de las Islas fue bautizado como la "batalla británica", pero dicha denominación adquiere ahora un doble significado por la crisis desencadenada tras el ultimátum de Estados Unidos a Irak.

En el primer asalto disputado hace una semana en el Celtic Park de Glasgow, el Liverpool logró mantenerse invicto en esta competición gracias a un tanto de Emile Heskey que igualó el acierto del goleador sueco Henrik Larsson (1-1).

Larsson, "Bota de Oro" de 2001, reapareció en dicho encuentro tras un mes de ausencia por una fractura de mandíbula y demostró que mantiene intacto su olfato goleador que ratificó en la final de la Copa de la Liga escocesa ante el Glasgow Rangers donde volvió a anotar aunque su equipo cedió finalmente el título a su eterno rival (2-1).

A sus 31 años, Larsson ha decidido volver a la selección de su país tras el anuncio de su renuncia en el Mundial 2002, sin embargo, el sueco no podrá formar dúo en la delantera del Celtic con su compañero Chris Sutton, que se fracturó la muñeca ante el Rangers el pasado domingo y será baja ante el Liverpool.

Los ingleses también acusarán otra ausencia producto del primer encuentro de la "batalla británica", ya que el senegalés El Hadji Diouf ha sido sancionado con dos encuentros por el Comité de Disciplina de la UEFA tras escupir a un aficionado del Celtic.

El conjunto escocés que dirige Martin O'Neill saldrá decidido en busca de la victoria. "Lo importante es acabar esta fase sabiendo que lo hemos dado todo por ganar", comentó O'Neill, cuyo equipo intentará romper la trayectoria del Liverpool en la Copa de la UEFA en la que aún no conoce la derrota.

El fútbol portugués, el único que logró situar a dos de sus representantes en cuartos, tendrá que emplearse a fondo para remontar las dos derrotas cosechadas en la ida por el Oporto y el Boavista ante el Panathinaikos y el Málaga, respectivamente.

Los "dragones" se vieron sorprendidos en su, hasta ahora, irreductible campo de Das Antas donde un solitario tanto del polaco de origen nigeriano Emmanuel Olisadebe les ha puesto contra las cuerdas.

Los jugadores de José Mourinho, intratables en su Liga donde aventaja al Benfica en 13 puntos, tendrán que sobreponerse al "infierno" en que se convertirá el Apostolos Nikolaidis de la capital griega si quieren seguir vivos en la competición.

El otro equipo luso, el Boavista recibe al Málaga sin los sancionados Rui Oscar y Fernando Avalos y con la necesidad de remontar el tanto logrado en la ida por el panameño Julio César Dely Valdés que puede valer la eliminatoria, ya que los malagueños aún no han caído en ningún encuentro de la Copa de la UEFA en su primera participación.

La última eliminatoria tiene al Lazio italiano como favorito, no sólo para pasar a semifinales, sino para luchar por la final que se disputará en el Estadio de La Cartuja de Sevilla el 21 de mayo.

El pequeño de los Inzaghi, Simone, puso en ventaja en al ida al conjunto italiano que acudirá a Estambul con la confianza que le ha dado su reciente victoria en el "calcio" (4-1, ante el Empoli), avalado por sus argentinos Diego Simeone, Claudio López y Lucas Castroman.

Por su parte, el técnico rumano del Besitkas, Mircea Lucescu, entiende que la eliminatoria está "muy abierta" y confía en el apoyo de los 35.000 incondicionales que abarrotarán el estadio Inonu para doblegar a las individualidades del Lazio.

- PARTDOS DE CUARTOS DE FINAL, VUELTA: