Durante esta semana, se hizo pública una denuncia de Nicolás Mardones, jugador del Club Palermo Bajo de Córdoba. Mediante una carta a la Federación provincial, explicó lo que vivió el 10 de octubre en una cancha de hockey.
La carta comienza explicando que es un descargo a partir de la tarjeta roja que recibió en la fecha mencionada. “Durante los últimos dos cuartos, el equipo oponente -Córdoba Athletic- comenzó a subir la intensidad en el juego y comenzaron a tener comentarios fuera de lugar, no solo eran insultos/amenazas si no que se cruzaban limites metiéndose con la sexualidad de mi persona”.
Nicolás, de 24 años, cuenta haber intentado hablar con la árbitra en cuestión, pero “no fue escuchado”, esa situación de insistencia derivó en que la jueza determinara sacarle una verde. La sanción, sumada a la impotencia que sintió Nico durante el partido, lo llevó a dirigirse incorrectamente a quien imparte justicia y eso le costó la expulsión.
“Acepto mi error y ofrezco mis sinceras disculpas por mi accionar. No obstante, considero importante que se tomen medidas frente a este tipo de comportamientos, que lamentablemente no son un hecho aislado, sino que se repiten en distintos partidos”, explicó.
La motivación para realizar este descargo es intentar que deje de pasar. “Más allá de todo esto y mi caso puntual siento que es una generalidad en el deporte la homofobia y la violencia. Que no se toman medidas al respecto de estas situaciones deja mucho que hablar de las instituciones, hay que aprender a escuchar, a hablar y a construir un deporte para todos”, sostuvo Nicolás.
“Me gustaría que se tomen medidas para que no vuelva a pasar, que capaciten bien a los árbitros para que ellos puedan calmar situaciones como estas, que esto tiene que ser el fin de esta homofobia en el deporte, porque el deporte es una las cosas más hermosas que le puede pasar a una persona”, agregó.
Hoy Nicolás se alejó del club por sentir que la institución no lo apoyó y no supo cómo manejar la situación. Él mantiene como premisa que “la salud mental es lo más importante. Es momento de frenar y no seguir dañándome”.
El deporte debe ser un lugar seguro para todos.