Dustin Poirier se enfrentará al ex campeón de peso pluma Max Holloway en su pelea de retiro por el título BMF en UFC 318.
Dustin Poirier estuvo en "The Pat McAfee Show" el viernes para anunciar que peleará una última vez en UFC y luego se retirará. Él y el campeón BMF, Max Holloway, pondrán punto final a su larga rivalidad con un tercer y último enfrentamiento en Nueva Orleans en UFC 318 el 19 de julio por el cinturón BMF.
Poirier (30-9) tiene un récord de 2-0 contra Holloway (26-8), ganando por sumisión en el primer asalto y decisión unánime. Sin embargo, cuando el peleador de 36 años, originario de Lafayette, Luisiana, entre al octágono este verano, será su primera pelea en más de un año. El peleador número 1 libra por libra de ESPN, Islam Makhachev, finalizó a Poirier en el quinto asalto de su pelea por el título de peso ligero en UFC 302 en junio de 2024, lo que probablemente dejó a Poirier con la indeseada distinción de ser el mejor peleador de UFC que nunca ha sido campeón indiscutible.
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Holloway, de 33 años, regresa al peso ligero tras perder contra Ilia Topuria en una pelea por el título de peso pluma en octubre. Su último combate de peso ligero fue en UFC 300 en abril de 2024, cuando noqueó a Justin Gaethje para hacerse con el título BMF.
Con toda la historia y el legado en juego, Brett Okamoto y Andreas Hale comparten sus primeras reacciones a la tercera entrega en esta rivalidad.
Rellena el espacio en blanco: Tener a la UFC de vuelta en Nueva Orleans es ____
Okamoto: Un mérito para Poirier, UFC y la ciudad. Francamente, UFC no hace suficiente de esto. Nunca estuvo claro que UFC llevaría la pelea de retiro de Poirier a su estado natal. El calendario de PPV de la compañía se establece con mucha antelación, y existen múltiples acuerdos que garantizan ciertas sedes para ciertas carteleras cada año. Pero Poirier es una estrella, y su último combate, sumado a una pelea por el título BMF contra otra estrella, Holloway, es un evento principal lucrativo. La UFC normalmente habría programado esto en Las Vegas, donde existe un precedente de venta de entradas a precios elevados para eventos importantes. Trasladarlo a Nueva Orleans requirió trabajo, negociación y esfuerzo. Habría sido fácil para la UFC programarlo según el calendario previsto para 2025, pero como Poirier es un talento especial y Nueva Orleans vio valor en albergar su última pelea, los aficionados verán que el combate se lleva a cabo donde debe. Es emocionante ver que la UFC está dispuesta a reconocerlo y a alejarse de su status quo.
Hale: Una narrativa perfecta. La UFC a menudo es cruel con los peleadores que están de salida en cuanto a la asignación de emparejamientos y la ubicación de las peleas. Anthony Smith tuvo la oportunidad de tener su última pelea en UFC Fight Night en Kansas City, Missouri, el sábado, no muy lejos de su ciudad natal, Omaha, Nebraska. Sin embargo, emparejarlo con la máquina finalizadora Zhang Mingyang le negó a Smith el final feliz que los fanáticos deseaban.
Poirier se encuentra en una posición más privilegiada. Sigue clasificado entre los 5 mejores pesos ligeros de la UFC, pero ha dejado claro que está listo para poner fin a su carrera. La pelea de retiro de Poirier en su estado natal se siente como algo en lo que la promotora trabajó diligentemente durante meses. El momento fue perfecto para que la UFC trajera un evento de pago por evento a Luisiana por primera vez en nueve años y mantuviera el ritmo habitual de peleas estelares con el cinturón BMF en juego. Si a esto le sumamos las legendarias trayectorias de Poirier y Holloway en el octágono a sus clasificaciones actuales de peso ligero, la cosa no puede ser mejor.
¿Es Holloway el oponente adecuado para la última pelea de Poirier en UFC?
Max Holloway celebra después de un impresionante nocaut sobre Justin Gaethje en el último segundo de la pelea.
Okamoto: 100%. Lo digo aun sabiendo que no es lo que Poirier quería. Poirier es un competidor, por eso el deporte lo adora. La idea de enfrentarse a un oponente contra el que ya tiene un récord de 2-0 no le atraía tanto como a otros. A Poirier le habría encantado demostrar que puede vencer a Topuria. También le habría encantado vengar la derrota por nocaut que sufrió ante Gaethje en 2023. Entiendo por qué Holloway no era la primera opción de Poirier, pero para los consumidores y el deporte, era una decisión obvia.
Poirier tiene la oportunidad de convertirse en el (quizás último) campeón BMF, ya que se habla de que la UFC retirará el cinturón junto con Poirier si gana. Además, como Poirier y Gaethje son tan idénticos en muchos sentidos, es perfecto que terminen su serie 1-1 (Poirier venció a Gaethje en 2018). También es la pelea ideal para Holloway, quien busca dejar huella en el peso ligero de aquí en adelante.
Hale: Absolutamente. Se dieron todos los elementos necesarios para que la trilogía fuera el canto del cisne perfecto para Poirier. La historia entreambos se remonta a 2012, pero Holloway tiene algo que Poirier nunca ha tocado: oro de UFC. Es una oportunidad para poner fin definitivamente a su respetable rivalidad y una oportunidad para que Poirier se retire como campeón, aunque sea simbólico. Holloway y Poirier también ocupan los puestos número 4 y 5, respectivamente, en el ranking de peso ligero de UFC, por lo que el enfrentamiento tiene todo el sentido desde el punto de vista del emparejamiento. Holloway sin duda no se dejará ganar por Poirier. Está ansioso por finalmente lograr una victoria sobre Poirier y ascender en la clasificación de las 155 libras. Ambos estarán motivados para ganar y la pelea seguramente será un éxito rotundo.
¿Significaría más un título BMF para Poirier o para el legado de Holloway?
Okamoto: Poirier. Holloway ha sido campeón indiscutible de UFC. Ostentó el cinturón de peso pluma durante un tiempo considerable. Es considerado uno de los mejores pesos pluma de todos los tiempos. Poirier es una leyenda, pero nunca ha tenido un título indiscutible, y no puede decirse que haya sido el mejor de su categoría en ningún momento de su carrera (lo que tuvo mucho que ver con que su mejor momento coincidió con Khabib Nurmagomedov y Makhachev). Por lo tanto, el cinturón BMF significa más para el legado de Poirier que para el de Holloway. Sin embargo, el resultado de la pelea en sí significa más para Holloway, por supuesto, porque no es él quien se retira. Holloway quiere ganar un segundo cinturón en las 155 libras, y una victoria sobre Poirier probablemente lo dejaría a una victoria de una oportunidad por el título. Si Poirier lo vence por tercera vez, Holloway quedará fuera de la contienda por el título.
Hale: Poirier, por mucho. La credibilidad general del campeonato BMF ha disminuido desde su creación en 2019. Ningún campeón BMF ha ganado su siguiente pelea ni lo ha defendido con éxito. Jorge Masvidal, Gaethje y Holloway ganaron el título y perdieron su siguiente pelea, lo que significa que Kamaru Usman, quien venció a Masvidal en su siguiente pelea tras obtener el cinturón, y Topuria, quien recientemente venció a Holloway, tienen derecho legítimo al título ficticio. Todo es complejo hoy en día, pero si alguien se ha ganado el derecho a ser llamado BMF, ese es Dustin Poirier. Es uno de los favoritos de la afición, a quien se le ha impedido conseguir el oro de la UFC en tres ocasiones contra posiblemente los mejores pesos ligeros de todos los tiempos: Nurmagomedov, Charles Oliveira y Makhachev. Tener la oportunidad de alzar un título en su ciudad natal significaría mucho más para su legado que para el de Holloway, y proporcionaría una imagen duradera de un final de cuento de hadas que pocos tienen en UFC.