El colombiano no anotó en el GP de la Comunidad Valenciana, última fecha del Mundial. El paulista se convirtió en el primer brasileño en ganar un título.
David Alonso no tuvo el cierre esperado para su primera temporada de Moto2. El colombiano llegaba encumbrado al GP de Valencia, 22ª y última fecha de la 77ª temporada del Mundial después de enhebrar tres podios consecutivos (Australia, Malasia y Portugal). El circuito Ricardo Tormo lo complicó desde el viernes, no le tomó bien la mano a la Moto2 en las curvas de la pista intrincada. Así, no logró superar el corte de Q1 en la clasificación del sábado y debió partir desde el 20º lugar. Para la carrera, las dificultades continuaron y fue 18º.
De entrada, el piloto del Aspar Team estuvo a punto de quedar envuelto en una carambola que hubiera significado abandono seguro. Daniel Muñoz y Barry Baltus se enroscaron y terminaron en el piso. En el derrape, se fueron sobre la línea de Alonso, quien debió irse bien ancho, hacia afuera, para para evitar el impacto. Eso complicó aún más a Alonso, quien quedó 24º en el primer giro.
La chance de cerrar con puntos su última carrera del año había quedado definitivamente hipotecada. Su remontada apenas lo colocó 18º, a tres lugares del último peldaño que se premia con unidades. De todas maneras, el campeón de Moto3 de 2024 cerró una buena temporada, en la que logró un triunfo (Hungría) y otros cuatro podios para quedar noveno en el torneo. El arranque del año le costó porque la máquina de la división intermedia se maneja de manera muy distinta a la de la más chica. Fueron seis citas hasta que llegó el tercer lugar de Gran Bretaña. Hubo golpes, caídas y buenos resultados. El año que viene, en su segundo año entero, el colombiano apunta a pelear bien arriba con consistencia.
Diogo Moreira hizo historia para Brasil
Finalizado el GP de Francia, sexta fecha de la temporada, Diogo Moreira estaba a 61 puntos de Manuel González, el holgado líder de Moto2. En ese sexteto de cita, el brasileño había cerrado dos carreras sin anotar (Argentina y Estados Unidos) y su sueño de pelear por la corona en su segunda temporada en la categoría intermedia era una lejana utopía. Sin embargo…
A partir de ahí comenzó una remontada que quedará en la historia. De hecho, es récord para Moto2. Segundo en Gran Bretaña, segundo en Aragón, ganador en Países Bajos. Lo de Moreira fue brutal, al mismo tiempo que Manugas comenzaba a sufrir problemas. El español había ganado cuatro de las primeras nueve fechas, pero comenzó a perder rendimiento. Y llegó la estocada más fuerte: su descalificación de Indonesia. Su Kalex tenía un software no homologado y perdió los 20 puntos que tenía en la bolsa por el segundo lugar. Eso fue definitivo.
Moreira llegó casi campeón a Valencia. Llevaba 24 puntos de ventaja sobre 25 en juego. El paulista hizo una carrera tranquila y todo se definición cuando quedaban cinco giros para el final, cuando la destrozada cubierta trasera de González lo obligó a elevar la bandera blanca de rendición y la temporada estaba definida.
Diogo se convirtió así en el primer brasileño en ganar un título del mundo de motociclismo en cualquiera de sus divisiones y desató la locura, con amigos que lo recibieron ataviados con la Verdeamarela. Todos, claro, con un número más que importante en la historia del fútbol: el 10, el mismo que llevó Moreira en su carenado.
El brasileño pegará el salto a MotoGP para 2026 con la Honda satélite del equipo LCR. Eso sí, deberá elegir otro número porque el 10 es de Luca Marini, oficial en la marca del Ala. Ya avisó que será algo que resulte importante para Brasil. Mientras piensa cuál será, podrá celebrar su título, impensado allá por mayo.
