BUENOS AIRES -- Rocío Campos, de 20 años, es tan buena en el kitesurf que no sólo gana en mujeres sino que compite contra varones. "Me gusta enfrentarlos, no te perdonan una", dice. Ganó la 1ª fecha y este finde quiere repetir en la 2ª, en Punta Indio.
Pablo y Ruth eran fanas del windsurf pero descubrieron el kitesurf y se cambiaron. Ella era muy pichona, pero lo vio y se enamoró. La vela, la adrenalina, las maniobras y los saltos la cautivaron. Allá por el 2006 era un deporte más caro y menos seguro, pero la pareja Campos-Andreu decidió dejarla volar. Literalmente... Rocío Campos tenía 12 años cuando tuvo su primer kite, de 9 metros. "Casi me volaba, porque pesaba 35 kilos. Podía navegar sólo con 12 nudos, ni más ni menos. Pero Matías, un amigo, empezó a prestarme algunos barriletes más chicos y así comenzamos", repasa ella desde su Mar del Plata natal. Hoy, a los 20, es la principal esperanza argentina, junto a Juan Dowbley, de 11.
Comenzó a competir a los 15, cuando Agustina Cerruti, quien era la campeona argentina, la vio en la laguna de Mar Chiquita y la alentó. "En mi primera vez fui segunda, justo detrás de Agus, y eso me re motivó", cuenta ella. El finde pasado, en Monte Hermoso, ganó la primera fecha del Tour 2014 que organiza la Asociación Argentina en dos categorías: Mujeres e Intermedia.
Esta última es mixta porque compiten hombres. "Me gusta más que sólo contra mujeres, en la que somos menos y es más que nada dar espectáculo. Los varones no te perdonan una, se te meten adelante, te tiran el kite... Es mucho más salvaje, pero me encanta que sea salvaje y poder medirme con ellos", explica quien este finde buscará repetir en Punta Indio, a 150 kilómetros de Buenos Aires.
¿Y qué dicen cuándo les ganás?
Nada, que en mixta robo y que mejor suba a la categoría principal, que los mejores hombres... Pero me falta entrenamiento para eso. Aunque debo confesar que me encanta ganarles a los hombres (se ríe).
¿Y te gustaría tener una proyección internacional?
-Sí, claro, pero por ahora me falta nivel y es difícil por el apoyo, los viajes. Por ahora me ayuda la marca de kite Slingshot y Baki Wanita (ropa). Quiero ser campeona argentina de damas e Intermedia y luego ir por la categoría principal. Primero sé que debo ganarles a los mejores varones del país para pensar en competir contra la elite femenina mundial. Ya corrí en Venezuela y Dominicana y me fue bien. Pero me falta. Por ahora estudio Administración porque sé que pocos pueden vivir del kite.