LAKELAND, Florida -- Compitiendo con Dontrelle Willis por el quinto puesto en la rotación de pitchers abridores de Detroit, Nate Robertson superó un problema de casa llena el martes y recibió tres carreras en tres entradas en el triunfo de los Tigres 7-5 sobre Venezuela en un juego de práctica.
"Nate lució realmente bien saliendo de esa situación", dijo el manager de los Tigres, Jim Leyland. "El tiene aún un largo camino por recorrer, pero vi algunos progresos. Con la casa llena, sin out, y salió del problema. Pienso que esos es bueno", agregó.
El equipo de Venezuela presentó cuatro Tigres: el lanzador abridor Armando Galarraga, el primera base Miguel Cabrera y los jardineros Magglio Ordóñez y Carlos Guillén.
Willis también batalló, permitiendo dos carreras, una de ellas limpia, en tres episodios.
Robertson tuvo marca de 7-11 y promedio de efectividad de 6.35 con Detroit la temporada pasada luego de abrir 28 juegos.
"Me siento bien", señaló Robertson. "Mi hombro se siente bien. Sólo debo evitar cuentas largas. No estoy sintiendo presión. Espero 32 aperturas este año y 200 entradas. Tenemos aquí al menos siete abridores y todos pueden lanzar, así que simplemente voy a realizar lo que tengo que hacer y ver en que termina", agregó.
Robertson obligó tres rodados para out luego de llenar la casa, y dijo que sólo estaba tratando de que los venezolanos conectaran la bola.
El receptor de los Tigres, Gerald Laird, dijo que Robertson nunca perdió la compostura, y que tenía lo necesario para conseguir el quinto puesto en la rotación de abridores.
Galarraga fue el abridor por Venezuela y Leyland dijo que le impresionaron los tres episodios que lanzó, en los que sólo permitió dos imparables, sin carreras.
Cabrera tuvo dos carreras impulsadas y un sencillo contra Willis. Guillén bateó dos imparables y Ordóñez no conectó en cuatro oportunidades.