NUEVA YORK -- David DeJesús apenas ha jugado 20 partidos esta temporada con Tampa Bay pero poco a poco ha puesto su propio sello en lo que podría ser la quinta clasificación en seis años a los playoffs para los Rays.
El hijo de padres puertorriqueños, quien vivió su niñez en Manalapan, Nueva Jersey, fue reclutado por los Mets de Nueva York en la ronda número 43 del sorteo de jugadores de 1997, aunque no firmó.
Luego fue elegido por los Reales de Kansas City en el 2000 en la cuarta ronda del draft, proveniente de la Universidad de Rutgers, y ha hecho un buen papel con los Rays desde que lo ficharon en un canje con los Nacionales de Washington el pasado 23 de agosto.
Pese a que los Rays están en franca lucha con los Indios de Cleveland y los Vigilantes de Texas por los boletos de comodín de la Liga Americana, DeJesús indicó sentirse muy confiado restando cinco partidos en el calendario regular.
"Definitivamente (que siento la oportunidad)", señaló el jardinero izquierdo a ESPNDeportes.com tras la victoria de Tampa Bay sobre los Yankees de Nueva York, 7-0, la noche del martes. Fue su quinta victoria de forma consecutiva y octava en los últimos 10 partidos.
"Estoy emocionado por lograrlo y listo para eso. Lo que tenemos que hacer es preocuparnos de nosotros mismos. Tenemos que seguir saliendo allá afuera para ganar juegos y encargarnos de todo. Ahora mismo estamos jugando un buen béisbol. Estamos consiguiendo bateo oportuno y tenemos que seguir haciendo nuestro trabajo", dijo DeJesús.
De Jesús inició la temporada cumpliendo con su segundo y último año de contrato con los Cachorros de Chicago, con quienes bateó para .250 con seis jonrones y 27 carreras impulsadas. Fue trasladado a los Nacionales el 19 de agosto y sólo estuvo con ellos durante tres partidos antes de que los Rays se hicieran de sus servicios.
Nunca ha saboreado la postemporada en las 10 campañas que ha vivido en Grandes Ligas, siempre iniciando sus vacaciones tras el último out de la temporada regular. En las siete temporadas completas que jugó con Kansas City, presenció 682 derrotas incluyendo tres campañas al hilo en las cuales perdieron por lo menos 100 partidos. Cubs perdieron 101 el año pasado.
El puertorriqueño, actualmente con promedio de .271, conectó un par de dobletes que impulsaron dos carreras en la victoria sobre los Yankees. Su primer doble a la esquina del jardín derecho anotó la segunda de tres carreras en el episodio inicial, y luego en la novena entrada pegó otro doble al mismo lugar para sellar el marcador 7-0.
"Nunca pensé que esto me iba a pasar. Estoy bendecido de estar en esta situación. Es un gran equipo, un grupo de muchachos que juegan divirtiéndose y ojalá podemos seguir ganando", indicó.
Según el receptor José Molina, el nuevo miembro de los Rays no ha decepcionado desde que se unió al grupo de Joe Maddon.
"A David lo trajimos aquí a eso, a que hiciera su trabajo como siempre lo ha hecho en otros equipos", dijo el boricua.
La victoria les dio a los Rays una marca de 10-7 sobre los Yankees, su cuarta campaña con un récord ganador sobre el equipo neoyorquino (11-8 en 2005, 10-8 en 2010 y 2012). Han ganado cinco de ocho partidos en Yankee Stadium este año, a una sola victoria de asegurarse una marca ganadora en el nuevo estadio por segunda ocasión (5-4 en 2010).
También se aseguraron el segundo lugar divisional en el Este de la Americana, detrás de los líderes Medias Rojas de Boston Red Sox, y acortaron a cuatro el "número mágico" de clasificación a la postemporada. Cualquier combinación de victorias de los Rays o derrotas de los Vigilantes que sumen a cuatro les garantizaría un pase a playoffs.
"Tenemos la confianza que si seguimos jugando así como estamos, creo que nos vamos a meter ahí, a por lo menos ese juego eliminatorio que hay que jugar", declaró el relevista dominicano Joel Peralta.
"Lo único que tenemos hacer es seguir ganando partidos y no preocuparnos por los equipos que están atrás", concluyó.