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Empezó la fiesta del Mundial

AP

Después de un largo camino que se inició con el último pitazo de la final de Yokohama hace casi cuatro años, y que recorrió unos 194 países con 847 partidos eliminatorios, por fin llegó el momento de disfrutar la fiesta de un nuevo Mundial.

En efecto, ha sido una larga espera llena de emociones y drama, de alegrías que han dado vida al sueño mundialista de 736 jugadores con sus respectivos compatriotas, y de desilusiones que han roto el corazón de otros centenares de futbolistas y millones de seguidores.

En el pasado han quedado las eliminatorias -muy largas por cierto- y la forma en que se desempeñaron los equipos, no necesariamente nos debe anticipar su accionar en Alemania.

Muchas cosas pueden cambiar en dos años, en un mes, en cuestión de horas... En el Mundial tienen éxito quienes estén mejor en ese momento.

Pues bien, ha llegado el momento, la hora cero. Ha llegado el Mundial y con ello el juego de pronósticos e ilusiones.

Personalmente, disfruto cada Mundial como amante del fútbol, y es ese mi punto de partida el día de hoy para compartir con ustedes mis expectativas.

Cabe destacar, como mencioné anteriormente, que mucho puede cambiar en los distintos equipos conforme llega el momento de su primera presentación.

Como regla, no me gusta tomar como parámetro los resultados de los partidos preparatorios que las selecciones han realizado en días previos.

Creo que el primer duelo marcará el "momento" anímico para cada plantel, y éste tendrá un efecto importante en el aspecto técnico-táctico.

FAVORITOS

Dentro del grupo de favoritos están algunas de las grandes potencias de siempre, equipos llamados a ser protagonistas en todos los Mundiales.

Brasil - Al igual que millones en el mundo, lo veo como el gran favorito.

Desde las eliminatorias sostuve que de no cambiar mucho el accionar del equipo canarinho llegaría como el más fuerte aspirante. Pues bien, Brasil ha mantenido su nivel -o lo ha mejorado- con relación a la eliminatoria.

Cuenta con los "Cuatro Fantásticos" en el ataque, y el hecho de que Ronaldinho se haya consagrado en la Champions y que Ronaldo muestre ahora mejor forma que en la liga española, ha mejorado la imagen del Scratch -muchos lo ven como invencible- y ha inyectado la moral del vestuario con una sana arrogancia.

Esto, desde luego, se convierte en un arma adicional de Brasil pues cada vez parece crecer más la intimidación -y hasta el temor- que infunde en los demás.

Alemania - Digan lo que digan, Alemania es Alemania. Es potencia y siempre lo será, en especial cuando juega en su propio terruño.

Si bien se habla de la juventud en la selección teutona, el técnico ha buscado equilibrarla con experiencia, y tiene un promedio de edad de 26 años y 11 meses, que curiosamente es el mismo promedio de edad de las últimas diez selecciones campeonas del mundo.
Las críticas le han llovido torrencialmente a Klinsmann y sus pupilos, sin embargo, una y otra vez, Alemania nos ha acostumbrado a reconocer su voluntad de hierro y su mentalización como armas primordiales.

Paralelamente, la falta de experiencia de algunos jugadores representa un arma de doble filo, y podría deparar un desenlace poco deseado para los locales.

Italia - Otra potencia acostumbrada a llegar lejos aunque últimamente se ha olvidado de ganar por falta de goles.

Esta vez, sin embargo, me parece que Italia llega muy distinta en el departamento ofensivo.

En las últimas tres o cuatro temporadas del Calcio han florecido los goleadores italianos. Es así como cañoneros de la talla de Luca Toni y Alberto Gilardino han demostrado en estos últimos años que pueden mantener una cuota constante de goleo, la cual se ha trasladado a la selección. Irónicamente, ahora que parecía solventarse el Talón de Aquiles azzurro, ha aparecido el fantasma de las lesiones y ha decidido atacar el departamento defensivo. Habrá que ver la evolución de Zambrotta, Nesta y Gattuso para que Italia pueda por fin llegar con un equipo sumamente balanceado y fuerte en todas sus líneas...

Nota aparte, no creo que el escándalo de corrupción les afecte, más bien podrían tomarlo como incentivo para limpiar un poco la imagen del balompié italiano.

Inglaterra - Nos tiene acostumbrados a llegar fuerte en los últimos torneos mayores para después quedarse en el camino. Sin embargo, creo que esta vez el grupo base que ha protagonizado esas decepciones vuelve con mayor madurez y podría finalmente llegar más lejos.

Si desglosamos a Inglaterra línea por línea, nos encontramos con un equipo capaz de levantar la copa el 9 de julio. No en vano la Premier League será la más representada en este Mundial, y su estilo agresivo, sólido y dinámico será bien ilustrado por el combinado inglés. Quizá los puntos débiles de Inglaterra son el arquero y los laterales. A parte de eso, posee algunos de los mejores zagueros centrales del momento: Ferdinand, Campbell, Terry, Carragher. Usted puede escoger...

Mientras que la medular es de lujo y posiblemente la mejor de las 32 selecciones con David Beckham, Frank Lampard, Steven Gerrard y el genial Joe Cole jugando lado a lado, casi nada...
Al frente, la buena noticia de la participación de Wayne Rooney ha elevado la motivación del plantel. Y es que los ingleses siempre necesitan un incentivo así: ya lo fue Owen como el "chico maravilla" en Francia 98, o en el Mundial pasado, la incorporación milagrosa de Beckham después de la fractura de un pie. Pero, sin lanzarle tanta carga al pobre Rooney, creo que Inglaterra tiene en Peter Crouch a un jugador que podría ser clave para sus aspiraciones pues hasta el día de hoy no he visto a ninguna defensa controlar efectivamente su juego aéreo (cabe destacar que no es de ir a cabecear centros sino más bien de pivotear para esos extraordinarios mediocampistas con llegada que tiene este equipo).

POSIBLES SORPRESAS
Dentro de este apartado de posibles sorpresas me he reservado los nombres de selecciones que antes estaban tras la Cortina de Hierro y que paulatinamente se han ido abriendo camino ya bajo sus propios aires independientes. Me refiero en primera instancia a la República Checa, posiblemente el equipo cuyo fútbol he disfrutado más en los últimos años (después de Brasil, claro) y que tan buena impresión nos dejara en la pasada Eurocopa 2004.

Este es uno de los equipos de mayor experiencia en el Mundial, y cuenta inclusive con un par de jugadores de aquella Eurocopa del 96 cuando los checos fueron subcampeones. Ah, y después de todo no estarán jugando tan lejos de su tierra...

Otra de las selecciones a la que le puedo reservar una posible plaza de sorpresa es a Serbia y Montenegro, otro equipo que ahora se las juega a nivel independiente, y que en realidad viene a ser como tener a la antigua Yugoslavia -con el permiso de los serbios- pues su gusto por el fútbol y sus dotes naturales los hacen portadores de un juego gustoso y eficaz.

Por eso, no fue sorpresa ver como este equipo clasificó invicto y con sólo un gol en contra en un grupo que incluía a España. Esta hazaña fue el mérito de una impresionante línea defensiva. Si Brasil tiene a sus "Cuatro Fantásticos" en ataque, Serbia y Montenegro tiene a sus "Cuatro Famosos" en defensa: Dragutinovic, Vidic, Gavrancic y Krstajic, quienes conforman una muralla casi insuperable.

Debo hacer un paréntesis para mencionar a un par de selecciones que podrían tener un desempeño de "doble filo": Holanda y Argentina. Me parece que éstos dos combinados pueden tener un gran Mundial y llegar lejos, o bien, convertirse en decepciones.

En el caso de Holanda, dependerá en gran parte de cómo asimilen la presión los jóvenes del equipo; recordemos que veteranos como Seedorf, Davids y Makaay no fueron convocados, y en algún momento la experiencia podría ser vital en un Mundial.

Mientras tanto, Argentina tiene equipo como para ser campeón; habrá que ver eso sí, si el técnico Pekerman ha podido unir al grupo a tiempo para este desafío. Me parece que aquí todo dependerá del grado de unidad que presente la albiceleste.

El Mundial reúne a grandes figuras pero como suele suceder, también hay quienes brillan por su ausencia.

Por la lógica de no haber clasificado, no tendremos a un Samuel Etoo, a un Ryan Giggs, a un David Suazo, o a los búlgaros Petrov.

Mientras que, por razones menos lógicas pero igualmente respetables, tampoco podremos ver a jugadores emblemáticos como Cuauhtemoc Blanco, Rolando Fonseca, Javier Zanetti, Fernando Morientes, Clarence Seedorf, Edgar Davids, y otros.

También, por cosas de la vida -por no decir fantasmas del destino- algunos se perderán el Mundial por lesión, como son los dolorosos casos de Cissé, Edmilson y el paraguayo Cardozo, entre los más notables de última hora.

Por el contrario, el certamen de Alemania nos brindará la oportunidad de disfrutar de algunas de las grandes figuras del momento.

El mejor jugador del mundo, Ronaldinho, no podía faltar a una fiesta como esta, pasa por su mejor momento y seguramente será la gran estrella del certamen.

Además estarán otros que posiblemente vayan por su misma senda, como Lionel Messi, quien a sus 18 años también está llamado a brindar un aire fresco con su fútbol pícaro.

Estarán algunas caras conocidas del Mundial pasado y otras que debutarán pero todos hacen realidad su sueño de participar en el Mundial.

Me alegra ver finalmente en un Mundial a los Balones de Oro Andriy Shevchenko y Pavel Nedved, al ex goleador del Manchester Dwight Yorke, o ver recuperados y con la posibilidad de jugar a Totti, Raúl, Xavi, Rooney y Koller, entre otros.

También me alegra la idea de poder ver en su última Copa del Mundo a algunos verdaderos maestros como Zinedine Zidane y Luis Figo, y a eternos participantes como los arqueros Mohammed Al Deayea y Kasey Keller, ambos jugando su cuarta Copa.

Suerte a todos en su participación pero en especial suerte a los nuestros...

Llegó el segundo Mundial del nuevo milenio, y no me queda más que invitarlos a que disfruten cada instante del máximo evento deportivo del planeta.

Así que, esté donde esté en el planeta, dirija su mirada hacia Alemania pues de allí saldrá durante un mes, la esencia pura del deporte que une razas y culturas, que cura heridas políticas y sociales, y que puede llevar un mensaje de paz a todos los rincones.

El fútbol es vida, y hay que vivir la gran fiesta del Mundial...