Dan Rafael 17y

Hombre Cenicienta

Durante 71 años, James J. Braddock fue el único boxeador conocido como "Cinderella Man", pero ahora el ex campeón de los pesados es digno de ese título.

Tras que Carlos Baldomir derrotara a Zab Judah en Nueva York-el pueblo de Judah-para ganar el campeonato del mundo de la categoría welter en enero, los tratantes de Baldomir en Sycuan Ringside Promotions empezaron a llamarlo "Cinderella Man" también. Una versión moderna de todas maneras.

No hay guante de boxeo alguno que pueda calzarle mejor a Baldomir que ese apodo.

La película que mostraba el ascenso de Braddock de ser un trabajador miserable que intenta ayudar a su familia peleando por poco dinero y realizando trabajos extraños a su monumental derrota del campeón de los pesados, Max Baer, en 1935 había salido seis meses antes de que Baldomir se enfrentara a Judah.

El éxito de Braddock representa la típica historia de Cenicienta. Y Baldomir la replicó muchos años después.

"Cuando vi la película no podía esperar para decirle a Carlos, 'Tienes que ver esto. Quiero saber lo que piensas'", dijo Scott Woodworth de Sycuan. "Apenas vio la película nos dijo, 'Esta es mi vida. Así es como vivía yo'. Es el Hombre Cenicienta".

Baldomir aceptó su nuevo apodo.

"Hay muchas similitudes entre mi vida y la verdadera historia del Hombre Cenicienta", dijo. "Es la razón por la que ahora me dicen así".

Baldomir intentará seguir con su insólita carrera-también derrotó a Arturo Gatti en el mes de julio-cuando se enfrente al rey de la libra por libra Floyd Mayweather Jr. el sábado por la noche (HBO PPV, 9 ET) en el Mandalay Bay en Las Vegas. Y aunque no logre una victoria más, Baldomir conservará la herencia que le mereció este 2006.

Ciertamente está confiado en que ganará.

"Soy fuerte", dijo Baldomir. "No pude knockear a Judah porque no paró de mantenerse. Este muchacho, es rápido, pero voy a poder knockearlo. Voy a dar golpes durante toda la pelea y sabré cuando lo haya lastimado. Si lo lastimo, terminará hundiéndose".

El éxito de Baldomir fue realmente inesperado.

Mayweather nació para ser campeón. Creció en el gimnasio. Su padre, Floyd Mayweather Sr., peleó contra Sugar Ray Leonard. Su tío, Roger Mayweather, ganó dos campeonatos mundiales.

"No creo que haya habido otro boxeador con la misma parafernalia y preparación que Floyd Mayweather Jr.", dijo el entrenador del Salón de la Fama y analista de HBO Emanuel Steward.

A Mayweather le gusta hablar acerca de cómo su padre le puso los guantes de boxeo para bebes el día que fue trasladado del hospital a su casa.

"Cuando era chiquito golpeaba todo", dijo Mayweather. "Solía golpear tanto las manijas que se terminaban saliendo".

Su destino era evidente. Se convirtió en un amateur y ganó una medalla olímpica de bornce en 1996. Dos años más tarde, se convirtió en el campeón mundial de los livianos junior al derrotar al boxeador número uno de la división, Genaro Hernández.

Mayweather (36-0, 24 KOs) sumaría cinturones de tres divisiones más-livianos, welter junior y welter-a su colección de títulos mientras se ocupaba de llegar a ser el boxeador número uno del mundo.

Dejando de lado la ajustada primera pelea contra José Luis Castillo, Mayweather ha sido casi perfecto como profesional.

También recibió buen dinero por sus peleas, ganando millones por pelea en los últimos años, gracias a un lucrativo contrato con HBO.

Y a Mayweather le gusta hablar acerca de su gusto por las cosas finas en la vida. Les contará de su mansión en Las Vegas-la que tiene 10 baños-y sobre sus siete autos que varían entre un Bentley GT 2006 a una Ferrari y hasta un Rolls Royce Phantom.

Baldomir (43-9-6, 13 KOs) no podría ser más distinto, aunque su insólito camino a la cima está a punto de cruzarse con el de Mayweather.

Baldomir creció en la pobreza en la provincia de Santa Fé, Argentina, la misma ciudad que produjo al gran campeón de todos los tiempos de los medianos, Carlos Monz´pn, quien murió en un accidente de auto en 1995.

"Éramos muy humildes, muy pobres", dijo Baldomir. "Mi padre vendía plumeros en las calles y vivíamos con lo que el ganaba".

Monzón era un héroe en su país, y particularmente en Santa Fé. De pequeño y durante el reinado de Monzón en 1970, Baldomir hacía lo que todo el mundo cuando Monzón peleaba: Lo miraba y soñaba con ser como el.

"Cuando Monzón peleaba, nos juntábamos con amigos y conocidos (entre 50 y 60 personas) en una casa para ver la pelea", dijo Baldomir, quien comenzó a boxear a los 13 años de edad. "Y eso es lo que me hacía querer convertirme en boxeador, ver a Monzón pelear. Yo dije, 'Eso es lo que quiero hacer. Quiero ser como este muchacho'".

A diferencia del debut profesional de Mayweather, el de Baldomir en 1993 no tuvo la misma fanfarria. A pesar de que soñaba ser como Monzón, la realidad era que el boxeaba porque necesitaba el dinero desesperadamente para poder mantener a su mujer y a sus cuatro hijos.

"Al principio no me fue bien", dijo Baldomir, quien en ciertas ocasiones tomaba peleas sin haber entrenado.

Simplemente se presentaba la noche de la pelea y boxeaba lo mejor que podía.

"Carlos tuvo todas esas derrotas cuando no entrenaba adecuadamente", dijo Javier Zapata, quien comenzó a manejar a Baldomir a los pocos años de haber comenzado su carrera profesional. "Cuando empezó a entrenar como correspondía, empezó a ganar. Hay veces que es necesario luchar al comienzo de la carrera. Luego cambias las cosas te transformas en un ganador. Esa es la clave".

Una vez que Baldomir comenzó a tomarse el boxeo más a pecho, comenzó a ganar más consistentemente, especialmente después de empezar a entrenar con el icono argentino Amilcar Brusa, quien también había entrenado a Monzón.

"Me acuerdo de la grandeza de Monzón todos los días en el gimnasio porque mi entrenador era el entrenador y profesor de Monzón", dijo Baldomir. "Monzón es una leyenda y también lo es Amilcar, de 84 años de edad".

La pareja funcionó. Han pasado casi ocho años de la última derrota de Baldomir, una decisión de ocho rounds contra Alberto Corrales en Argentina el 11 de diciembre de 1998. Desde ese entonces, Baldomir está a 19-0-2, incluyendo una victoria contra Cortes en su revancha, la decisión unánime contra Judah y la destrucción de Gatti de noveno round.

La mejora de Baldomir llegó "básicamente porque desde 1999 al 2006 entrené mucho más fuerte", dijo. "Me dediqué mucho más y me lo tomé con seriedad".

Peleó en distintas partes del mundo, viajando a ocho países en cuatro continentes en busca de una oportunidad para mejorar la vida de su familia.

"Cuando entro al ring para pelear lo hago por mi familia", dijo. "Cada golpe que recibo es por mi mujer y por mis hijos, para que nunca tengan que pasar por lo que yo pasé de chico".

Finalmente en mayo de 2005, el aún anónimo Baldomir derrotó a Miguel Rodríguez en Chicago en una pelea de eliminación por el título en la tarjeta no principal de la pelea por el título de los pesados entre Lamon Brewster y Andrew Golota. La victoria le valió la pelea de enero con Judah, quien ya esperaba pelear contra Mayweather en abril.

Un distraído Judah no fue buena pareja para un preparado Baldomir, un luchador que casi knockea a Judah y ganó la decisión. Dijo que nunca tuvo dudas de que ganaría, aunque el resto del mundo dudaba de su capacidad.

"Yo estaba confiado porque sabía que Judah estaba cometiendo un error", dijo Baldomir. "Estaba pensando en Mayweather y no en mi".

Luego llegó la pelea contra Gatti-y otra victoria para Baldomir.

"Cuando llegó la pelea de Gatti, todos pensaban que la pelea contra Judah había sido un golpe de suerte", dijo Glenn Quiroga de Sycuan. "Pregúntenle a Arturo Gatti si fue un golpe de suerte. Y después de esa pelea, la gente dijo que había ganado porque Gatti estaba poniéndose viejo. ¿Y ahora? ¿Cual será la excusa después de la pelea de Mayweather? Más vale que empiecen a inventar una, porque nuestro muchacho va a ganar".

Su muchacho también está ganando más dinero del que imaginaron. Cuando peleó con Judah, Baldomir ganó 100,000, su monto más grande hasta ese día. Como campeón, Baldomir ganó más de un millón para defender contra Gatti, otro boxeador al que derrotó en Atlantic City, N.J.

Aunque Baldomir no ganará los 8 millones de Mayweather, su cartera de 1.5 millones para pelear contra Mayweather en su pueblo será el monto más grande hasta el día de la fecha.

Hablando de pasar de la pobreza a la riqueza. Baldomir está lejos de sus días cuando su padre vendía plumeros. En ciertas ocasiones Baldomir hasta llevaba plumeros a los predios donde peleaba en Argentina. Intentaba venderlos a la tribuna para la que peleaba.

"Cuando vendía plumeros soñaba con boxear", dijo.

Durante un tiempo, Baldomir ganó más dinero vendiendo plumeros que peleando. El dinero no alcanzaba.

"Mis hijos comían una vez por semana", dijo. "Nunca me dediqué por completo a entrenar. Tenía que trabajar".

Pero vender plumeros tampoco era un gran negocio.

"Cada plumero costaba entre 10 y 15 dólares en Argentina", dijo. "Argentina no tiene una economía fuerte. Es difícil vender. Era realmente difícil vender los plumeros. Para ser sincero no quiero volver a vender un plumero en mi vida. Realmente no quiero pensar en ello. Pero cuando entro al ring me acuerdo de los momentos en que vendía plumeros y es lo que me motiva a seguir luchando".

El Hombre Cenicienta está motivado para evitar que el reloj marque la medianoche.

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