BUENOS AIRES -- Queridos lectores, es increíble la cantidad de turistas, de residentes en universidades o simples bohemios que vienen detrás de un destino distinto a nuestro país. Cantidad gigantesca de inmigrantes de Ecuador y Colombia que, por estos meses invaden la ciudad. ¿Qué buscan? Bien sabido es que en Argentina, no hay dólares, pero hay muchas otras oportunidades para aventurarse a una vida mejor. Todo esto demuestra que este país atraviesa uno de sus mejores momentos desde el 2001. Inmersos en una novedad y por momentos, extravagante revolución cultural, no sé a dónde iremos a parar. Por lo pronto, acaparemos el interés de todos nuestros hermanos latinoamericanos.
Y estos visitantes ilustres que llenan de color y alegría a la ciudad, también hablan de fútbol, se fanatizan con Boca Juniors, Estudiantes o River Plate. Es claro que la ciudad donde mejor se sigue la Copa Libertadores es en Buenos Aires. En este tema, vale aclarar que el periodismo deportivo, en Argentina, es una actividad de altísimo vuelo, hay en el ejercicio de la profesión una filosofía que no se ve en otras regiones.
La city del Plata, por su lado, cambió. Día a día, se parece más a Latinoamérica. Y en este menjunje de visitantes, no hay uno que no se haga simpatizante de los equipos brasileños.
El capo total es el Atlético Mineiro comandado por el increíble Ronaldinho. Este artista de los tiempos, que no necesita varita para meterle música a la orquesta, juega un fútbol sensorial, profundo y sincero. Es decir, un fútbol que además de verse, se toca, puede olerse y hasta palparse. Tal vez, Ronaldinho esté atravesando el mejor momento de su carrera y el Atlético es consciente de esto.
En fin, mientras el precioso otoño porteño cae sobre la ciudad, aparecen en mi puestito de diarios, las tonaditas latinas pidiéndome información sobre fútbol. "Oye, chico, el Altlético es la gran sensación de la Copa, ¡cómo juegan los brasileños!". Bueno, no todos, me dan ganas de responder. El último campeón Corinthians ya no juega tan bien. Clasificó haciendo un gol en el minuto final.
"Oye, paisa, dame la revista El Gráfico, es conocida en toda América. Quiero ver como calificaron a mi equipo el Mineiro". Ahora todos los estudiantes colombianos se han hecho hinchas del Mineiro.
"¡Qué grande que es Ronaldinho Gaúcho, pe!", me dice otro y me pide el Popular deportivo. Hay para todos los gustos, pero es evidente que todos coinciden con el fútbol brasileño.
Y en especial con el equipo de Ronaldinho, un equipo que ataca mucho, tiene un especial respeto por el tratamiento de la pelota, juega con alegría, muy suelto y sin temor a perder. Un equipo cien por cien de Brasil. Da gusto verlo. Hoy está en lo alto de esta Copa y esperemos siga danda espectáculo.
Atlético Mineiro terminó con puntaje ideal, en la mayoría de sus presentaciones convirtió muchos goles y dio cátedra de fútbol. Ronaldhino estuvo formidable en todos los partidos. Recordemos la rivalidad que estableció con Arsenal, al cual le hizo una docena de goles en dos partidos.
Por ahora, este equipo es candidato. De todo lo visto hasta el momento, es lo más atractivo. Por supuesto que está Boca Juniors que, pese a jugar horrible, siempre es candidato. Habrá una eventual final entre Boca y Ronaldhino. ¿Román-Ronaldhino? Al final de sus gloriosas carreras. ¿Quién es el mejor? Ambos representan lo mejor del fútbol de cada país.
¿Sería lindo una final así, no? Soñar no cuesta nada. Aunque más de una vez, los sueños se vuelven realidad.