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No es un tema menor...

PEKIN -- El rancho de los 6.000 obreros que trabajan en las obras de la Villa Olímpica y otras instalaciones para Pekín 2008 se ha convertido en un tema espinoso para el Ayuntamiento pequinés, que quiere alejar de esos lugares a los vendedores ambulantes de comida y controlar los precios de ésta.

Según el departamento municipal de Calidad y Seguridad Alimentaria, los vendedores en las inmediaciones de estas obras no tienen licencia y sus productos pueden ser perjudiciales para la salud de los trabajadores.

Por ello, el Ayuntamiento ha instado a los obreros a que usen los comedores colocados junto a los barracones donde viven, en los que se venden bandejas de comida a 5 yuanes (unos 0,50 euros, o 0,65 dólares).

No es fácil sin embargo convencer a los obreros de ello, ya que los vendedores ambulantes suelen ofrecer cajas de comida a 4 yuanes (0,40 euros, 0,53 dólares), y la diferencia, aunque pequeña a priori, es importante para unos obreros con sueldos bastante bajos (en ocasiones de sólo 30 ó 40 euros mensuales).

Para intentar ahuyentar a los vendedores (y hacerles la competencia), el Ayuntamiento aprobó ayer bajar el precio de la comida de 5 a 4 yuanes, instando una vez más a los obreros a que consuman alimentos que hayan sido convenientemente supervisados por las autoridades, según relató el diario Beijing Times.

El rancho de los obreros "olímpicos" suele ser muy sencillo, en general una gran bandeja de arroz (o pan blanco) junto a un poco de carne y vegetales para acompañar.

Los obreros de las instalaciones olímpicas, como los de muchos lugares en construcción de todas las ciudades chinas, son en su mayoría inmigrantes rurales, que en ocasiones sufren la discriminación de los chinos urbanos.

En abril de este año, seis trabajadores de una obra relacionada con los JJOO -una nueva línea de metro que conectará con la Villa Olímpica- fallecieron en el derrumbe de un túnel, en el peor accidente relacionado con los preparativos para la gran cita deportiva.

Uno de los cadáveres no fue encontrado hasta seis semanas después de ocurrido el suceso.