Al calendario ya le quedan pocas hojas para la fecha marcada; son menos de 30 días para llegar al destino que el mundo se ha planteado como la luz al final del túnel. Aunque no necesariamente lo sea. Los Juegos Olímpicos de Tokio siguen con muchas preguntas por responder. ¿Cuál será el nivel deportivo en unos Juegos marcados por la pandemia? ¿Cuántos aficionados podrá haber en los estadios? (por el momento se dice que 10 mil) ¿Cómo evitar que haya una ola de contagios que convierta a los juegos en una bomba epidemiológica? o... ¿Cómo hacer para que los japoneses vuelvan a enamorarse de unos juegos que por el momento repudian? Las respuestas estarán pronto en las páginas de los diarios, en los principales espacios de radio y televisión y, finalmente, en los libros de historia.
Mientras tanto el mundo, también con dudas y certezas, se encamina hacia la justa deportiva que se roba los reflectores cada cuatro años (aunque esta vez hayan sido cinco). Los selectivos de natación, atletismo y gimnasia de Estados Unidos dejan ver que el gigante deportivo está aceitado para la cita. Otras potencias mundiales también se reportan con muchos de sus atletas en la cima. Así lo han demostrado Australia, Gran Bretaña y China (entre muchos otros). Pero del otro lado del mapa, hay países que apenas han podido detener los contagios y dan pasos de elefante para vacunar a su población. Los Juegos serán la historia de un mundo que convalece, pero que busca las primeras señales de que puede dejar los hospitales.
Es un mundo que también deja ver sus radicales diferencias económicas y de organización. En México, el nuevo coronavirus ha hecho que las disputas políticas sean más evidentes que en otros años y los atletas, como siempre, el punto más vulnerable en medio de las trincheras. Los ejemplos sobran: el equipo de natación se encuentra abandonado sin apoyo; Yarely y Jessica Salazar, dos ciclistas importantes con posibilidades de medalla (según los rankings mundiales), están cerca de quedar fuera de la delegación que está en el avión rumbo a Tokio.
La cuenta regresiva marca 30 días y en ESPN Digital se hará, día a día, un recuento de la actualidad olímpica. Tokio está a la vista y estos Juegos históricos tienen muchas cosas por contar.