Tras un ciclo olímpico accidentado y con resultados por debajo de lo esperado, el medallista olímpico logro la redención al ayudar a la selección de relevos mixtos durante Tokio 2020 a alcanzar una medalla de plata
Para todo el seguidor de los deportes olímpicos, el nombre de Luguelín Santos se encuentra grabado en la memoria cortesía de una de las dos medallas que el país alcanzó durante los Juegos Olímpicos Londres 2012. Su presea de plata llegó minutos después del oro de Félix Sánchez, lo que trajo esperanza al deporte dominicano para continuar escalando dentro de una disciplina en la cual el joven dominicano se veía como el posible relevo del dos veces medallista de oro.
Sin embargo, las cosas no fueron salieron del todo bien para Santos, quien ha tenido que superar múltiples adversidades para regresar a unos Juegos Olímpicos. Desde su medalla de plata en Londres, el dominicano tuvo que enfrentar múltiples obstáculos, los cuales dejarían al corredor en lugares donde todos esperaban fuera mejor. En 2013, Santos alcanzaría el tercer lugar en los 400 metros planos (con un tiempo de 44.52 segundos), en el Mundial de Atletismo celebrado en Moscú. Ese mismo año el corredor regresaría a Rusia para la “Liga Diamante”, competencia donde quedó en un quinto lugar con solo tres puntos, una cantidad muy inferior si se compara con los que obtuvo el primer puesto (20).
El 2014, Santos solo alcanzó un podio, este fue en los 400 metros planos del XVI Campeonato Iberoamericano de Atletismo. Fuera de esta competencia tuvo actuaciones destacadas, mas no podios, la más sobresaliente fue el cuarto lugar en los Juegos Centroamericanos y del Caribe Veracruz 2014.
Durante 2015 y 2016, Santos se mantuvo en una montaña rusa de desempeño. Lograría una medalla de oro en los Juegos Panamericanos de Toronto, a pesar de no tener un gran inicio de temporada. Iría a Rio en las olimpiadas del 2016, pero no logró la clasificación y su última carrera del año culminó en Bruselas con un tiempo de 45.02 segundos. 2017 fue un año complicado en donde las lesiones le jugaron una mala pasada al dominicano.
Se recuperaría con unos sólidos Juegos centroamericanos y del Caribe en Barranquilla durante 2018, consiguiendo oro en los 400 metros planos y plata en la carrera de relevos 4x400. Para completar el buen año, el corredor dominicano también alcanzaría el primer lugar en el equipo de las Américas en la Copa Continental de la 1AAF en la carrera de relevos 4x400.
Santos era promesa de éxito en Lima 2019, pero quedó en séptimo en su defensa de la medalla de oro lograda en 2015, quedando descalificado para el mundial celebrado en Doha.
Ahora, con logros individuales importantes y con mucho que redimir, Santos se enfrentó a uno de los retos profesionales más importantes de su carrera, alcanzar una medalla en Juegos Olímpicos nuevamente.
El velocista fue clave durante la etapa semifinal de la competencia de relevos mixtos 4x400, que hizo su debut en Tokio 2020. Gracias al dominicano, el cuarteto caribeño se logró meter a la final en la que ganaría la medalla de plata y a pesar de que no participó de la última carrera, no queda duda de que su esfuerzo en semifinales y su veteranía fueron fundamentales para guiar a una joven selección donde el promedio de edad ronda los 23 años (sin contar a Santos).
Una merecida medalla de plata para un atleta que ha tenido que superar adversidades de toda índole para convertirse en el primer dominicano en la historia que gana dos medallas en dos disciplinas distintas.
Nota realizada con información de Fernando Sena.