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En 2023, los deportes femeninos vieron un crecimiento insólito en cuanto a popularidad y ratings televisivos. Nada mal para el año previo a los Juegos Olímpicos de París 2024, que promete mucho más. No solo fue en el fútbol, sino también en el baloncesto, el tenis y en deportes que no reciben tanta cobertura, como el voleibol universitario... El futuro se ve positivo.
EL MUNDIAL PROVOCÓ UN BOOM PARA EL FÚTBOL FEMENINONo se puede negar que el Mundial de Australia y Nueva Zelanda 2023 fue un éxito rotundo. Alentó la pasión de aficionados alrededor del mundo, contó con una cifra récord de casi dos millones de asistentes y generó más de 570 millones de dólares en ingresos.  “Generamos el segundo ingreso más grande de cualquier deporte, sin contar por supuesto a la Copa Mundial masculina, en el escenario mundial. No hay muchas competencias, incluso en el fútbol masculino, que generan más de 500 millones”, señaló el Presidente de la FIFA, Gianni Infantino, en la segunda edición de la Convención de Fútbol Femenino de la FIFA. Donde Alexia Putellas había sido la máxima figura del fútbol mundial en 2022, su compatriota Aitana Bonmatí se convirtió en la reina de este deporte en 2023 y de su mano, España ganó el primer Mundial de su historia. Bonmatí se consagró como Mejor Jugadora del Año de la UEFA y Balón de Oro 2023, entre otros galardones. Por sus actuaciones en el Mundial -- o tal vez porque eran leyendas disputando su último Mundial --, otras jugadoras cautivaron la atención y los corazones de los hinchas alrededor del globo, como las siguientes: la colombiana Linda Caicedo, las españolas Salma Paralluelo y Jenni Hermoso, las inglesas Mary Earps y Lauren Hemp, la japonesa Hinata Miyazawa (ganadora de la Bota de Oro del torneo), las australianas Sam Kerr y Steph Catley, la holandesa Jill Roord, las estadounidenses Lindsey Horan, Alex Morgan y Megan Rapinoe, la alemana Alexandra Popp, la sueca Fridolina Rolfo, la nigeriana Asisat Oshoala, la francesa Kadidiatou Diani y la brasileña Marta. Por otro lado, el caso Rubiales le trajo publicidad al fútbol femenino, sí o sí, especialmente porque fue un tema que marcó tanta polémica a nivel deportivo y social. Incluso, varias marcas patrocinadoras y colaboradoras de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) se manifestaron a favor de Jenni Hermoso y sus compañeras de la selección española campeona del mundo cuando explotó el escándalo.
EL INTERÉS POR LA LIGA MX FEMENIL SIGUE CRECIENDOEn junio, el Estadio Azteca impuso récord de asistencia en la final de vuelta del Torneo Clausura 2023 de la Liga MX Femenil, entre América y Pachuca, con 58,156 asistentes. Las Águilas consiguieron su segundo título al vencer por marcador global de 4-2. El torneo subsiguiente, el Apertura 2023 disfrutó de la mejor asistencia a los estadios en su historia, con 511,140 personas (310,453 hinchas en la fase regular y 200,687 en la liguilla), según cifras de la propia Liga MX Femenil.  En noviembre, sin embargo, la final de ida entre América y Tigres del Apertura 2023 de la Liga MX Femenil registró la peor asistencia a un partido por el título en las últimas cinco finales. Asistieron apenas 17,234 aficionados al Estadio Azteca, donde las Amazonas golearon al conjunto local por 3-0. Al partido de vuelta en el Estadio Universitario -- en que Tigres se consagró campeón por sexta vez al dominar al América por 3-0 en el marcador global -- asistieron 38,483 fieles. La liga reportó un récord de audiencia televisiva con un rating de 1.8 millones de televidentes y 3.9 millones de personas en alcance para la final de vuelta; ambos encuentros de la final se pasaron por televisión abierta. Los hinchas en México reconocen y quieren seguir el gran nivel de las jugadoras de la Liga MX Femenil. Entre ellas está la estelar delantera de las Tuzas del Pachuca, Charlyn Corral, de 32 años, quien hizo historia este 2023 como la máxima goleadora del mundo a nivel mundial, para beneplácito de la afición mexicana. Corral anotó un total impresionante de 34 goles este año, dato confirmado en el Ranking de la IFFHS (Federación Internacional de Historia y Estadística de Fútbol).
EL EJEMPLO ARRASTRADicen que las palabras convencen, pero el ejemplo arrastra. Por ejemplo, el baloncesto femenino, tanto a nivel colegial como de la WNBA, ha recibido un (gran) empujoncito en años recientes de las grandes figuras del baloncesto masculino para ayudarle a crecer en popularidad hasta los niveles actuales. El 20 de febrero de este año, Steph Curry -- baja del Juego de Estrellas de la NBA esa misma noche por lesión -- causó sensación cuando se presentó en el Stanford Maples Pavilion para apoyar a la estrella de Stanford, Cameron Brink, en la victoria sobre UCLA, 71-66. Brink es ahijada de su madre, Sonya Curry, así que se han conocido toda la vida. En ese juego estaban también presentes el entonces mariscal de campo de los San Francisco 49ers, Trey Lance, y el tackle defensivo de los Niners, Javon Kinlaw. ¿Quién olvida al legendario Kobe Bryant apoyando los eventos femeninos con su hija Gigi antes de su fallecimiento en 2020? Cabe mencionar que Curry lleva años apoyando a las niñas deportistas y a los deportes de mujeres. Desde al menos 2018, ha invitado a varias jugadoras de baloncesto de preparatoria estelares a su campamento selecto para varones. En 2021, él y su esposa Ayesha -anunciaron la creación de una dotación de becas para elevar el atletismo femenino en Davidson, alma máter del astro de la NBA. La Iniciativa ‘Curry Family Women’s Athletics Initiative’ apoya los 10 programas de atletismo femeninos de Davidson. Justo antes de la histórica victoria de España ante Inglaterra en la final del Mundial, Pep Guardiola elogió a Aitana Bonmatí como ‘la Iniesta del fútbol femenil’. La jugadora que ganaría el Balón de Oro de 2023 ya era reconocida en todo el mundo, pero cuando uno de los entrenadores más condecorados de la historia en el fútbol masculina le echa piropos a su juego, mucha más gente presta atención. Si los deportes femeninos necesitan o no la popularidad de las estrellas masculinas para crecer es debatible, pero que agradecen sus comentarios de apoyo, sus tuits enloquecidos cuando hay golazos o canastas increíbles y, por supuesto, su asistencia a los partidos, eso es indudable.
FRENESÍ POR EL TENIS FEMENINO EN 2023 La histórica victoria de Coco Gauff en el U.S. Open -- primera vez que una adolescente estadounidense ganó el evento desde que Serena Williams se llevó el título en 1999 -- disfrutó de 3.4 millones de espectadores en ESPN. Para ponerlo en perspectiva, ese total superó por un millón a los 2.3 millones de espectadores que atrajo la final masculina, donde Novak Djokovic ganó su 24to Grand Slam y estableció un récord de la era moderna. Según ESPN, la audiencia de la final de Gauff también aumentó un 92% con respecto al equivalente del año pasado, lo que la convierte en la final femenina más vista de cualquier transmisión importante de tenis en ESPN y la segunda transmisión del U.S. Open más vista en ESPN.
SE DISPARARON LOS ÍNDICES DE AUDIENCIA Y LA ASISTENCIA EN LOS ESTADIOS EN 2023A medida que aumenta la pasión por los deportes femeninos, los medios siguen respondiendo... aunque reconozco que nos falta mucho por mejorar ya que las noticias de deporte femenino continúan siendo demasiado escasas. El aficionado de verdad no solo quiere ver el resumen de un partido en un noticiero, sino que quiere ver el partido completo. En 2023, la plataforma de streaming ESPN+ ofreció más de 25 mil horas de contenido de deportes femeninos, incluyendo baloncesto, voleibol, gimnasia, softbol, tenis del Abierto de Australia, Wimbledon y el U.S. Open, así como golf de la LPGA.  El partido de campeonato nacional de baloncesto femenino de la NCAA enfrentando a Angel Reese y LSU contra Caitlin Clark y Iowa -- incluido el drama y las bravuconadas entre las dos jugadoras -- atrajo un récord de 9.9 millones de espectadores y alcanzó un máximo de 12.6 millones, lo que lo convirtió en el partido de baloncesto femenino de la NCAA más visto de la historia. El aumento fue del 103% con respecto a 2022. Fue el evento universitario más visto en los cinco años de historia de ESPN+. Como ya mencionamos, dos millones de personas asistieron al Mundial de Australia y Nueva Zelanda 2023. El crecimiento es aún más impactante cuando miramos las cifras de asistencia del primer Mundial: 500,000 personas en Estados Unidos 1991. Un aumento del 300% en 32 años. Es importante comparar estos números al fútbol masculino. No solo porque el crecimiento ha sido mucho más meteórico en el fútbol femenino, sino porque las cifras se van acercando a su homólogo varonil. En el fútbol masculino, 3.4 millones de espectadores asistieron al Mundial de Qatar 2022, creciendo de 590,500 en Uruguay 1930. Está excelente tener más acceso a ver los partidos por la televisión o en línea. Sin embargo, nada se compara con asistir al estadio y vivir la experiencia de un partido en persona. Cada vez, más y más aficionados acuden a las tribunas en los deportes femeninos. Por primera vez, la final de la Champions League femenina se agotó con las 34,100 entradas vendidas para el partido insignia entre el FC Barcelona y el Wolfsburgo en el estadio del PSV Eindhoven. ¿Y recuerdan el récord mundial de asistencia que marcó el Barcelona femenino en 2022 con 91,648 personas presentes para su partido de la Champions ante el Wolfsburgo? Esa marca fue pulverizada este año.  En agosto de 2023, un partido de voleibol -- sí, de voleibol de la NCAA -- de la Universidad de Nebraska contra Omaha se convirtió en el evento deportivo femenino con mayor asistencia de la historia, con una asistencia oficial de 92,003 personas. En octubre, el último partido en casa de la temporada regular de la estadounidense Megan Rapinoe fue más que memorable. Se estableció un nuevo récord de asistencia a un partido de la NWSL. Asistieron 34,130 personas como parte de la despedida a la icónica jugadora en un partido en el que OL Reign y Washington Spirit disputaron un empate sin goles.
PRONÓSTICO ALENTADOREl 2024 se ve aún más brillante para los deportes de mujeres. Un reporte de Deloitte Insights predice que el año entrante los ingresos generados por los deportes de élite femeninos superarán los 1,000 millones de dólares por primera vez. Su pronóstico asigna el 55% a ingresos por publicidad, el 27% a ingresos por transmisión y el 18% a ingresos por jornada. El talento en la cancha existe -- con maravillosas deportistas y entrenadores --, los torneos y eventos de calidad existen, los hinchas existen, la pasión y el interés existen, los periodistas deportivos existen, los derechos de transmisión existen y el marketing existe. Pero falta ir mucho más lejos, en particular por parte de los inversionistas y la cobertura en los medios. ¡Unidos y con esfuerzos más consistentes a lo largo del año podemos continuar explorando el potencial ilimitado de los deportes femeninos! El deporte femenino merece igual respeto que el deporte masculino. Particularmente en nuestra cultura latina son muy conocedores del fútbol, por supuesto. A lo largo de mis 25 años de carrera como periodista de los deportes, me he topado con personas que me han dicho que las mujeres futbolistas no juegan al nivel de los hombres y por eso no les gusta el fútbol femenino. Como respuesta, les ofrezco una de las campañas más geniales generadas previas al Mundial, preparada por la empresa francesa de telecomunicaciones Orange, en apoyo de la selección femenina de Francia, Les Bleues: Ojalá que en el Año Nuevo y más allá puedan apoyar el fútbol femenino y otros deportes femeninos junto a sus seres queridos. Brindemos por un futuro cada vez más espectacular para el deporte femenino.
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