En un partido cambiante y con un final para el infarto, Miami Sharks cayó por 31-29 ante un Old Glory DC por la primera fecha de la Major League Rugby. La visita logró revertir un resultado adverso gracias al triplete del argentino Axel Müller, que fue indudablemente el héroe del partido. Reviví el partido en Disney+.
El inicio de la Major League Rugby vio a un Old Glory DC salir con mucha decisión a no dejarse atacar por Miami. La visita tuvo el control inicial de la pelota y supo ser paciente. A partir de una gran jugada de pasamanos, Axel Müller apareció en la punta y se escapó para marcar su try antes de los 3 minutos.
Y antes de que los locales pudieran reaccionar, Sean McNulty vio la tarjeta roja de 20 minutos por un tackle peligroso en la salida inmediata a la conquista rival. Por la expulsión de su compañero, Tomás Malanos debió dejar la cancha para rearmar el pack.
Aturdido, y superado sobre todo en el scrum, Miami se vio abrumado por un Old Glory que se sintió muy cómodo y con mucha presencia en campo rival. Apenas una escapada de los backs del local logró un poco de juego en campo de la visita. Como respuesta a esa incursión, Old Glory contestó con la misma fórmula que ya le había dado éxito: pelota a Axel Muller en la punta y try del argentino.
Ya con Tomás Malanos de vuelta y con el partido 15 contra 15, Miami Sharks fue lentamente encontrando su lugar en el partido: primero ganando metros a partir de la velocidad y destreza de sus backs; y luego definiendo sus ataques con la potencia de los forwards. Es así como llegaron los tries de Ma’Ake Muti, Mauro Rebussone y Tomás Cubilla para remontar el resultado e irse al descanso 21-10 arriba.
La segunda mitad perdió un poco de la intensidad que protagonizó los primero 40 minutos. Miami Sharks, reafirmando su dominio del cierre de la primera parte, pisó fuerte y a los tres minutos del complemento estiró más la ventaja con un nuevo try de Mauro Rebussone. Con 16 puntos de diferencia, los Sharks decidieron bajarle un poco el ritmo al partido y empezar a jugar con la desesperación de su rival, que le costó encontrar definir en los metros finales.
Sin embargo esa estrategia resultó ser un tanto falible. Lo que parecía una victoria segura terminó por resquebrajarse en los últimos 10 minutos, los cuales resultaron fatales para el local. Tras el try de KoiKoi Nelligan, Old Glory tomó impulso y acorroló a su rival. Esto se tradujo en las dos amarillas seguidas a Tomás Cubelli y Manuel Aldao, las cuales dejaron a los Sharks con 13 para defender una ventaja de 12 puntos.
Esta vuelta, Old Glory sacó aún más provecho de la superioridad numérica y, con una escapada de Jason Robertson, se puso a cinco puntos con tiempo en el reloj. Si bien uno podía anticipar una remontada, nadie imaginaba el final para el infarto que tuvo el partido.
Después de recuperar una pelota imposible en un line a 10 metros de su ingoal, Miami Sharks no logró sacar la pelota afuera con tiempo cumplido. La visita usufructuó ese error con otra jugada insólita: Jason Robertson puso un kick a la punta para buscarlo a Axel Mueller. El wing llegó con marca encima, pero el pique de la pelota lo favoreció. Es así como el argentino apoyó por tercera vez y le dio la victoria a su equipo por 31-29.