El sábado pasado se vivió una jornada bastante decepcionante para el rugby galés, porque en lo que debió haber sido una fiesta en el Principality Stadium por los cruces entre Ospreys vs. Cardiff y Dragons vs. Scarlets (todos clubes locales) por la fecha 15 del United Rugby Championship, quedó un saldo muy negativo de audiencia entre ambos cotejos. Todo el rugby, por Disney+.
La suma de público presente entre los dos duelos alcanzó los 28.328 espectadores, menos inclusive de la mitad de la capacidad que tiene el estadio (74,500). Ante esto, Mark Jones, head coach de Ospreys, equipo que cayó por 36-19 con su rival, compartió su visión acerca de la mejor forma para revivir el interés de la gente en la disciplina local: "Mi lado egoísta me dice que hay que abrir la cancha y poner entradas a una libra para llenarla".
"Es un día en el que todos se reúnen y celebran el rugby galés con el talento que tenemos y la forma en que podemos jugar. Tenemos que encontrar la manera de meter a 60.000 personas allí como antes... ese es el reto. En algún momento tenemos que volver a enamorar a la gente del rugby galés y hacer que acudan a los estadios a animar a los equipos", agregó el entrenador nacido en Builth Wells y con pasado en los Dragones Rojos como jugador.
Con respecto a lo que pasó en el terreno de juego, además del ya mencionado triunfo de Cardiff, en el turno siguiente, Scarlets se impuso por 31-23 sobre Dragons. De todas formas, pese a estos resultados, el poco apoyo de los aficionados locales puede ir también de la mano con el rendimiento actual de los equipos, ya que solamente el primer mencionado está momentáneamente en puestos de playoffs del URC.