La popularidad lograda durante la Copa del Mundo y el potencial que muestra Japón como mercado emergente para el rugby internacional han puesto en el centro de la escena a su seleccionado, que además, demostró estar a la altura de las potencias al meterse entre los ocho mejores de la RWC. De eso se habla en estos días en los principales medios de Europa.
En este marco, Japón podría recibir una sorprendente invitación para unirse a las Seis Naciones , luego de su éxito como anfitriones de la Copa Mundial de Rugby . La idea ha surgido en privado después que no se definiera su inclusión en el Rugby Championship y preferían hacerlo con un plazo de cuatro a cinco años antes de sancionar su participación.
No se han llevado a cabo discusiones formales, pero World Rugby es consciente de que, dada la creciente popularidad del rugby en Japón, figuras clave dentro de la organización del Seis Naciones han expresado su interés en crear un torneo que se extienda hasta el Lejano Oriente.
Nunca antes se había pensado la posibilidad de que el Seis Naciones pudiera ir más allá de Europa. Comenzó como una competencia entre países en las Islas Británicas antes de la inclusión de Francia en 1910 e Italia en 2000. Recientemente, se ha hablado de ampliar la competencia a Georgia o Rusia, tal vez a expensas de Italia, aunque nuevamente nunca ha habido un propuesta formal
Sir Clive Woodward es uno de los defensores de la promoción y el descenso en un intento por elevar los estándares. El éxito de esta Copa del Mundo ha puesto el estado de Japón en un foco más agudo. Hay un gran deseo dentro del deporte de capitalizar los logros de Japón, que finalizó primero en su grupo en la Copa del Mundo, por encima de Irlanda y Escocia.
Inglaterra ya está emprendiendo una gira de dos partidos allí el próximo verano, con juegos planeados en Kobe y Oita, y Gales también planea regresar. Los meses en los que se juegan las Seis Naciones, principalmente febrero y marzo, son propicios en Japón, lejos de la temporada de tifones, y al final del invierno llega a la primavera.
Incluso si el viaje fuera desalentador para los fanáticos viajeros, se esperaría que la venta de entradas se agotara solo con el público local. La novedad y el emocionante estilo de rugby de Japón también serían de gran interés para las emisoras.
World Rugby es consciente de la idea y no se ha opuesto a ella, aunque cualquier sugerencia de llevar a las Seis Naciones más allá de Europa seguramente encontrará la oposición de los tradicionalistas. Las ligas europeas también tratarían de resistir una nueva invasión de su agenda.
El Rugby Championship sería el hogar natural de Japón, y sin duda su destino preferido, dada la popularidad adicional de los All Blacks allí. Sudáfrica también tendrá un creciente número de seguidores, habiendo ganado la Copa Mundial de Japón. Sin embargo, un Seis Naciones global sigue siendo una propuesta intrigante, una que atraería a los patrocinadores y aumentaría las fuentes de ingresos.