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Crusaders fuera de la final, toda una rareza en el rugby de los últimos años

El 2021 no será un año más para la historia de Crusaders. Logró coronarse como el nuevo campeón del Super Rugby Aotearoa y con este triunfo obtuvo su quinto título consecutivo y el décimo segundo en su historia. En esa oportunidad había podido superar a Chiefs que fue su quinta víctima seguida en una final. Sin embargo, en el Super Rugby Trans-Tasman la historia cambió y se quedó en la puerta del partido definitivo que será protagonizado por Blues y Highlanders el próximo fin de semana.

A pesar de que el equipo de Christchurch no perdió ninguno de los encuentros en el torneo que combina franquicias de Nueva Zelanda y Australia, la diferencia de fue cruel (+97) y dejó a Highlanders segundo en la tabla de posiciones con +103, mientras que Blues quedó puntero del certamen en la fase regular con una diferencia de +119.

El primer campeonato con Scott Robertson al mando fue en 2017 donde no fue líder en tabla general y por eso tuvo que disputar la final de visitante frente a Lions y que ganó por 25-17.

Al año siguiente, en 2018 volvieron a enfrentarse pero en esta oportunidad en Christchurch y el resultado fue más abultado ya que concluyó 37-18 con Crusaders sumando su bicampeonato.

En 2019, Jaguares fue quien sufrió la sobriedad de Crusaders. Los de Scott Robertson fueron locales en Christchurch y vencieron 19-3. El equipo argentino tuvo un excelente torneo y logró llegar por primera y única vez al encuentro definitorio pero no pudo hacer nada frente al poderío del conjunto neozelandés.

El Super Rugby del 2020 fue cancelado por la pandemia del covid-19 que azotó al mundo. En junio se disputó el nuevo Super Rugby Aotearoa que incluyó a las cinco franquicias neozelandesas. El torneo se disputó en forma de liga y el que se coronó producto de seis victorias, un empate y una derrota fue, nuevamente, Crusaders.

El último campeonato local de 2021 se disputó de manera diferente a pesar de que solamente lo jugaron equipos maoríes. Primero se jugó con una fase regular que enfrentó a todos por duplicado, y luego los que quedaban en primer y segundo lugar disputarían la final. Allí se vieron las caras Crusaders y Chiefs, y el conjunto local se quedó con el encuentro por 24-13.

Pero también hubo historia antes de Robertson como head coach, y también estuvo asociada al éxito: levantó el trofeo en 1998, 1999, 2000, 2005, 2006 y 2008.