Nick Kyrgios siempre es noticia. Muchas veces criticado y, otras tantas, alabado. Nadie queda incierto de lo que haga o piense. Lo cierto es que el australiano llegó a Londres con un solo objetivo y lo tiene bien claro: ganar Wimbledon.
Sufrió y mucho para pasar la primera ronda ante Paul Jubb (necesito de cinco sets), pero en su segunda presentación se le vio un tenis de altísimo vuelo. Preciso, conectando winners con todos sus golpes y errando muy poco, el 40° del mundo derrotó a Filip Krajinovic por 6-2, 6-3, 6-1 y sabe que, jugando así, es serio candidato a dar contienda por el trofeo.
Luego de su pase a tercera ronda, no se quedó callado y reflejó sus sensaciones: “Hoy desde el primer momento me he sentido bien en el saque y la devolución. Le creé muchos problemas a mi rival y quería demostrarle a la gente que soy realmente bueno en esto. A veces siento que no tengo el respeto de todos”.
Fiel a su estilo, Kyrgios dejó en claro de lo que es capaz: “Estoy ante mi chance de ganar este torneo. Hoy no ha ocurrido nada fuera de lo normal. Y eso me encanta. Nadie puede decir nada de mi comportamiento”.
Por último, el campeón de seis títulos ATP, compartió un mensaje de inspiración para sus fanáticos: "Estoy cómodo conmigo mismo. A algunas personas les encanta derribarme. Solo quiero que las personas que vean esta conferencia de prensa o vean mis partidos de tenis crean en sí mismos, sean ustedes mismos y no lo que quieran otras personas. Sé lo que aporto al deporte. Soy una de las personas más importantes en el tenis. Estoy muy orgulloso de estar aquí. Es un sueño hecho realidad".
En la tercera ronda enfrentará a Stefanos Tsitsipas. El historial lo lidera el australiano por 3-1. Nadie se querrá perder uno de los partidos más atractivos del torneo.