La rumana Simona Halep (18ª), dos veces campeona de Grand Slam, derrotó la estadounidense Amanda Anisimova (25ª) por 6-2 y 6-4 y se plantó en la semifinal de Wimbledon, donde se medirá con la kazaja Elena Rybakina (23ª). En rueda de prensa, la ex número uno del mundo expresó su felicidad por volver a luchar en un torneo grande y aseguró que todo el esfuerzo no fue en vano.
Pese a algún bache en el final del encuentro, Halep definió con clase su duelo de cuartos de final y se ganó con justicia un puesto entre las cuatro mejores del torneo. "No fue sencillo porque ella empezó a jugar sin nada que perder y a pegarle muy fuerte al final del segundo set. Pero hice lo imposible para resistir. Me exigí lo máximo que podía, tuve mucha fe en mí para salvar un 0-40 y evitar el 5-5 y logré cerrar el partido 6-4”.
La rumana es la única campeona de Grand Slam que queda en el cuadro femenino y eso la sitúa como la favorita a la corona, en un certamen que le sienta bien y donde ya ganó en 2019. "Wimbledon es uno de mis torneos favoritos y estoy muy feliz de estar de vuelta en las semifinales. Luché mucho para llegar hasta acá, así que volver a esta ronda significa mucho para mí. Trabajé muy duro estos últimos meses y por eso quiero darme el crédito".
Halep disputó cinco finales de Grand Slam (perdió en Roland Garros 2014 y 2017 y en Australia 2018; mientras que ganó en París en 2018 y en Londres en 2019) y desea volver a competir una vez más por el título. El físico será un factor preponderante y de ello habló en conferencia: "Me siento bien física y mentalmente, estoy lista para volver a jugar. Me siento preparada y concentrada para el partido de mañana".