La variedad tenística que hay en la rama femenina es algo de lo cual ya parece hasta extraño de apreciar en el lado masculino desde la llegada del Big 3. Que los mejores y más ganadores de la historia de este deporte hayan sido contemporáneos hizo que muy pocos tenistas puedan triunfar en los grandes torneos.
Muy diferente es el panorama por el lado de las mujeres. Desde que empezó a decaer el poderío de Serena Williams, las ganadoras de torneos de Grand Slam fueron variando de manera continua, como sucedió recientemente con la consagración en el Abierto de Australia de Aryna Sabalenka (5ª) ante Elena Rybakina (25ª). Debido a esto, la última que logró defender con creces un título Major fue la propia norteamericana en Wimbledon 2016. Tras esto, ninguna pudo lograrlo.
Desde ese entonces, el trofeo soñado por todas siempre fue levantado por diferentes jugadoras. Entre las que más se destacaron están Naomi Osaka con cuatro títulos, Ashleigh Barty e Iga Swiatek con tres y Simona Halep junto con Angelique Kerber con dos, pero sin poder defender sus trofeos conseguidos.
La que mayor chances tiene de poder cortar con esta racha y llevarse no solo el gran trofeo sino también los 2000 Pts a casa es la polaca Iga Swiatek (1ª), quien tiene bajo sus brazos Roland Garros y US Open 2022, mientras que Rybakina, reciente finalista de Australia, tiene la misión de llevarse por año consecutivo el título de Wimbledon.