El mundo del tenis aún sigue conmocionado y agradecido por la tamaña batalla que ofrecieron el español Carlos Alcaraz (2°) y el italiano Jannik Sinner (1°) este domingo en la final de Roland Garros.
En el 12° enfrentamiento entre sí, primero en una definición de Grand Slam, los dos mejores jugadores del mundo se encargaron de confirmar que el deporte blanco estará en buenas manos durante al menos la próxima década, entregando todos los condimentos posibles en un encuentro que duró cinco horas y 29 minutos, y rememoró a los antiguos e inolvidables pleitos entre el legendario Big 3.
En la misma línea que el estadounidense Andre Agassi, el sueco Mats Wilander, el británico Andy Murray y el suizo Roger Federer, entre otros, el alemán Boris Becker también reveló su admiración por el duelo celebrado en la Philippe Chatrier, en declaraciones a TNT Sports, aunque puntualizó en la decepción del vigente bicampeón del Abierto de Australia: “Para Sinner este partido es algo brutal. Perder una final de Grand Slam con puntos de partido es algo muy duro, incluso llegó a sacar para partido".
"Creo que no hay nada peor que eso, aunque puede estar orgulloso de su actuación. La verdad es que se comportó como un campeón, luchó y jugó su mejor partido sobre una cancha de polvo de ladrillo hasta la fecha. Eso volverá a suceder, tal vez sea más afortunado la próxima vez", prolongó el ex número 1 del mundo, de 57 años y retirado en 1999.
No obstante, el dueño de 49 títulos en el circuito masculino, seis en eventos grandes, destacó la capacidad del pupilo de Juan Carlos Ferrero, el cual salvó tres match points y remontó dos sets para ganarse un lugar en los libros dorados: “Hay que darle las gracias a los dos. Casi fue un milagro que Carlos acabara ganando este partido, porque Jannik lo tenía en su mano, venía jugando un tenis casi perfecto. Creo que ha sido el mejor partido que he presenciado en directo, el nivel de tenis ha sido irreal".
"Es una gran lección para los niños en casa. La forma en que se comportaban y la actitud que mostraron todo el tiempo, no pusieron una sola excusa durante cinco horas y media. Ambos encontraron soluciones, golpearon la pelota perfectamente. No se lo podemos agradecer lo suficiente. Ya no es la longitud del partido, es la forma en que jugaron y cómo se movían. Dieron el 100%, por primera vez en mi vida me hubiera encantado ver un empate”, manifestó el nacido en Leimen, quien jamás logró acceder a la definición en el certamen francés.
Por último, Becker comparó el cruce con aquellos protagonizados por tres de los más grandes de la historia: “Este tipo de enfrentamientos ya los vivimos con Federer, Djokovic y Nadal. Aquellos duelos épicos nos acompañaron durante más de 15 años, pues este fue exactamente el nivel al que he visto a Carlos y Jannik este domingo. El partido fue increíble. Siento mucho que uno de los dos tuviera que perder, pero estos son los partidos para los uno entrena, los partidos que te hacen enamorarte de este deporte”.
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