Pese a garantizar show con los mejores singlistas del mundo, el nuevo formato del dobles mixto del US Open convulsionó completamente el circuito en los últimos meses, recibiendo críticas al por mayor de los principales especialistas como la checa Katerina Siniakova (1ª).
Luego de que los experimentados italianos Sara Errani y Andrea Vavassori pusieran el grito en el cielo por tamaña apuesta, el cuarto Grand Slam de la temporada continuó generando enfado en los habituales protagonistas de la modalidad al priorizar el dinero sobre el tenis, celebrándose en la semana previa al inicio del cuadro principal de individuales, conocida como Fan Week, y con partidos que se jugarán al mejor de tres sets, a cuatro games, sin ventajas y con un desempate a diez puntos en lugar de un tercer parcial.
Justamente la nacida en Hradec Králové, de 29 años y reciente campeona en Wimbledon, junto al neerlandés Sem Verbeek, el cual había manifestado que su corazón estaba sangrando por la polémica decisión del evento norteamericano, alzaría la voz para exponer su descontento en Canal+: "Cuando dos número 1 del mundo en dobles no entran al torneo, entonces probablemente no hay nada más que decir al respecto. No estaría sorprendida si no entro realmente. Me mantendré de este modo".
Cabe destacar que la medallista dorada en los Juegos Olímpicos de París 2024, quien también totaliza 30 trofeos en dobles femenino, diez en torneos de Grand Slam, finalmente será de la partida al unir fuerzas con el salvadoreño Martín Arévalo (1°), compitiendo contra parejas de alto nivel como Jannik Sinner (1°) y Emma Navarro, Carlos Alcaraz (2°) y Emma Raducanu (46ª), Casper Ruud (12°) e Iga Swiatek (3ª), Daniil Medvedev (14°) y Mirra Andreeva (5ª), y Nick Kyrgios (640°) y Naomi Osaka (51ª), entre otros.