Emma Raducanu seguirá trabajando en 2026 con el entrenador español Francis Roig y es noticia. ¿Por qué? Porque es una tenista adepta a los cambos y a un inconformismo que se ve reflejado en su tenis.
En su desafortunada gira asiática, la británica tuvo que lidiar con una variedad de problemas de salud y estado físico en una nueva derrota ante la N°219 del mundo, Lin Zhu. Pero fue apenas una derrota más. Una entre tantas.
Por ello contrató al exentrenador de Rafael Nadal, de cara a la preparación para el pasado US Open, pero solo ha ganado cuatro partidos en cinco torneos desde entonces.
La británica ha tenido una línea irregular este año, propiciada en parte por la ausencia de lesiones importantes, y consiguió ser la número 33 del mundo en julio, después de llegar a las semifinales de Washington, las terceras desde que ganara el título en 2021 en Nueva York. Además, este año también llegó a los cuartos de final de Miami.
Tras sufrir derrotas con punto de partido en contra tanto en Seúl como en Beijing se retiró de su partido de primera ronda en Wuhan antes de llegar aparentemente en medio de su mejor forma física a este torneo en Ningbo.
Pese a esto, continuarán juntos con el objetivo de recuperar el nivel que le hizo ser campeona del US Open en 2021.
El final de temporada llegó antes de tiempo y se bajó de los últimos dos torneos del año, Tokio y Hong Kong, por la enfermedad que arrastra desde hace semanas. Todo sea por su bienestar.
