La menor brisa de viento hace volar al polvo. El polvo es volátil y a veces invisible. Construir un reinado desde el polvo parece una utopía. Una utopía que Rafael Nadal alcanzó.
A dos semanas de cumplir 34 años, el manacorí lleva 59 títulos en polvo de ladrillo y 12 de ellos fueron en Roland Garros, fundamentales en su carrera para ser el hombre con mayor cantidad de títulos de Grand Slam: hoy tiene 19, a uno de Federer.
Su efectividad es del 91,78%, donde ganó 436 partidos y apenas perdió 39. Sí, 39 partidos en 18 años. Entre 2005 y 2007 ganó 81 partidos seguidos. Y entre 2017 y 2018, completó 50 sets de manera consecutiva en polvo de ladrillo.
Ante sus dos mayores rivales, su historial en polvo es brutal: 14-2 ante Roger Federer y 17-7 ante Novak Djokovic, el jugador que más veces lo derrotó en su superficie.
Sus tempranas lesiones hicieron a muchos anticipar un final de carrera temprano. Pero Rafa se recuperó y este mismo 2020 fue número 1 del mundo. El parate por Covid-19 podría significar el final de 16 años seguidos ganando, al menos, un título en polvo de ladrillo.