El capitán del equipo alemán de Copa Davis, Michael Kohlman, asumió el papel de "tapado" en la semifinal que disputará en Madrid contra Rusia, el conjunto favorito para hacerse con la ensaladera, pero recordó que así ha sido durante toda la competición y ya están en la penúltima etapa.
"Quizá a la gente le sorprenda que hayamos llegado hasta aquí, pero vamos mejorando año a año. Fuimos cuartofinalistas en 2018, también en 2019 en Madrid y estamos aquí por algo. Y estamos listos para más", afirmó Kohlman, que no cuenta este año con Alexander Zverev, a quien no le convence el actual formato de Copa Davis.
Tras ganar el grupo F que se disputó en Innsbruck (Austria), el equipo germano ha tenido que adaptarse a "lo diferente" que es jugar en Madrid, pero el capitán aseguró que "dos días son suficiente, aunque diez hubieran sido mejor".
Sobre Rusia, que disputa estas finales con los números dos y cinco del mundo, Daniil Medvedev y Andrei Rublev, Kohlman dijo que el equipo ruso "es tan fuerte que aunque se enfermasen dos jugadores, lo seguiría siendo".
"Somos los tapados, pero ya lo éramos antes de esta semifinal", indicó quien tiene a disposición a Jan-Lennard Struff, Dominik Koepfer, Peter Gojowczyk, Kevin Krawietz y Tim Pütz.
El equipo que tiene tres títulos de la Davis (1988, 1989 y 1993) le ganó en esta edición 2-1 a Serbia y 2-1 a Austria en la fase de grupos y en cuartos de final a Gran Bretaña por el mismo resultado.