Una jornada pletórica para el tenis sudamericano del otro lado del mundo. De los cinco participantes masculinos que se presentaban en la última ronda de la clasificación al Abierto de Australia, los cinco lograron el pase de manera directa sin necesidad de convertirse en lucky losers.
Tomás Etcheverry logró ese primer paso con el que seguramente soñó toda su vida y lo festejó como un título propiamente dicho. ¡Jugará por primera vez un main draw de Gran Slam!
El Australian Open ya es una realidad. El platense (129 en el mundo) obtuvo un soberbio resultado ante el italiano Flavio Cobolli (199º) en la ronda final al batirlo por 6-3 y 6-2.
Pero no fue el único argentino que festejó en Melbourne. Porque Marco Trungelliti (198 en el ranking mundial), un habitué desde las Qualys, jugará su noveno Grand Slam (tres en Australia) accediendo desde la fase previa. El santiagueño superó a Damir Dzumhur (161º) por 6-2, 2-6 y 7-5.
Además, Alejandro Tabilo (136º) y Tomás Barrios (151º) también pasaron y le dieron una alegría por duplicado a Chile. El primer barrió a Elias Ymer (169º) por 6-1, 6-2 y volverá a disputar el primer Grand Slam del año como ya hizo en 2020, cuando alcanzó la segunda ronda. El segundo superó a Filip Horansky (193º) por 7-5, 6-4 y también debutará en este torneo.
Para cerrar el 5 de 5, el ecuatoriano Emilio Gómez (155º), en silencio, derrotó a Thomas Fabianno (202º) por 7-5, 4-6 y 6-3. De esta manera serán 14 los latinoamericanos en el cuadro masculino de Australia.