Horas antes, su novia, la belga Kim Clijsters, se imponía a la estadounidense Lindsay Davenport, por 6-4 y 7-5. Con este resultado, Hewitt completó una semana plena de éxitos y continuó su racha después de haber ganado en el torneo anterior en Scottsdale (Arizona).

Hewitt no tuvo problema alguno para desembarazarse de "Guga" en menos de una hora. El brasileño, que había tenido que completar su partido de semifinales contra el alemán Rainer Schuetler, aplazado por la lluvia ayer sábado cuando dominaba un set a cero, tuvo trabajo extra hoy en la reanudación.

Al vencer a Schuetler por 6-2, 3-6 y 6-2, Kuerten quemó gran parte de sus energías en este empeño, y solo tuvo dos horas de descanso para hacer frente al número uno en la final.

Hewitt, que había vencido sin apuros al estadounidense Vincent Spadea en la otra semifinal, tuvo 24 horas de descanso, y se vio favorecido por esta circunstancia. Ya en la pista, manejó el encuentro contra "Guga" con gran seguridad, cometiendo únicamente 10 errores no forzados, mientras que el brasileño hizo 30.

Con esta victoria, Hewitt amplía su reinado al frente de la clasificación mundial a 70 semanas. Para conservar su liderato solo tenía que alcanzar las semifinales, y aunque tuvo que salvar tres puntos de partido en primera ronda, contra el marroquí Younnes El Aynaoui, después ha solventado sus partidos con autoridad.

Pero donde ha exhibido todo su tenis al máximo ha sido en la final contra Kuerten, basta comparar que si la lucha por el título el pasado año, contra el británico Tim Henman, se convirtió en la final más corta de la temporada (15 juegos), en la de hoy se disputó un juego menos.