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Disfruta Rose y hace disfrutar en su primer juego con New York

Derrick Rose jugó por primera vez con los Knicks tras dejar atrás la demanda en la que estaba involucrado. AP

NUEVA YORK – Derrick Rose quizás tendrá un problema en un futuro cercano si Joakim Noah continua mostrando su fascinación con los pases que se convierten en asistencias.

El sábado por la noche, Rose jugó su primer partido como local en Madison Square Garden y no decepcionó.

Rose animó a los 19,812 fanáticos que presenciaron el juego de apertura del calendario local en la 'Arena Mas Famosa de Mundo', motivándolos para que se pusieran de pie antes del salto de balón, antes de mostrarles su deslumbrante forma de manejar el balón y después se hizo cargo del partido en el cuarto periodo, anotando 11 de sus 13 puntos, para frenar los pasos de la remontada de los Memphis Grizzlies y marcar la diferencia de los New York Knicks en la victoria de 111-104.

“Estoy contento por haber salido de eso. La afición fue excelente, energética. Estuvieron involucrados desde el inicio”, afirmó Rose, que marcó 6 de 13 tiros desde el campo y agregó cuatro rebotes y tres asistencias.

“Tratamos de mantener (la forma), pero ellos son un gran equipo. Ellos contraatacaron y nuestra defensa como que tambaleó un poco, pero pudimos mantenerlos eludirlos en la recta final”.

Los días del Jugador Más Valioso de 2011 estuvieron contados cuando la gerencia de los Chicago Bulls tenían ofertas por sus servicios. En necesidad de un armador de renombre con la inaccesibilidad de los 'playmakers' disponibles al mercado libre que se avecinaba, Phil Jackson, el presidente de los Knicks y leyenda del conjunto de la Ciudad de los Vientos, aprovechó la ocasión aun teniendo en cuenta las varias operaciones de rodillas que le habían costado una gran parte de la carrera de Rose.

Pero un escándalo fuera de la cancha limitó a que el base de 28 años estuviera al cien por ciento en línea con sus nuevos compañeros durante el campamento de entrenamiento y el calendario de la pretemporada.

Rose perdió por completo los seis partidos de pretemporada mientras acudía una corte de Los Ángeles donde se disputaba un juicio civil en su contra luego de que una mujer presentara una demanda que exigía una compensación económica de $21.5 millones por presuntamente haber sido violada por el tres veces All-Star y dos amigos suyos.

Pero el pasado 19 de octubre, el jurado federal de ocho miembros no lo encontró culpable, ni a sus dos amigos, por las alegaciones expuestas por la demandante.

El sábado en uno de los grandes escenarios del baloncesto, Rose evidenció por qué años atrás fue considerado uno de los jugadores de élite en su posición en sus primeros tres años jugando en la NBA antes de sufrir el horrible desgarre del ligamento cruzado anterior de la rodilla izquierda en el primer juego de la primera ronda de los Playoffs en 2012, lo que desafortunadamente fue el inició de la decadencia de su brillante carrera.

Los ochos minutos que Rose jugó en el último periodo evocaron viejos recuerdos.

Fue un totalmente diferente Rose que dijo presente el sábado a diferencia del que todo el mundo vio el martes en Cleveland en la paliza de 117-88 que les propinaron los Cavaliers.

Los Knicks tuvieron ventaja de 16 puntos en el tercer cuarto, pero la determinación de los Grizzlies acortó el marcador a 87-85 restando 9:14 en el reloj.

Tras un tiempo fuera oficial, Rose entonces retornó en lugar de su suplente Brandon Jennings, quien tituló durante la pretemporada, y encendió los motores de la ofensiva neoyorquina, aportando cuatro puntos durante un parcial de 12-0 que aumentó la pizarra 99-85 cuando eludió la defensa de su contrincante, Mike Conley, y encestó un tiro sobre su alcance faltando 5:26.

“Tenemos que tener más tiempo jugando con uno al otro. Aunque yo estaba entrenado en Los Ángeles y los chicos estaban aquí, esto un deporte de equipo”, dijo Rose. “Estuve fuera y ellos tuvieron más tiempo jugando con Brandon. Entonces regreso y tienen que acostumbrarse a la manera que juego. Estaba tratando de conocer el juego y tratar de no forzar nada en el primer juego”.

Rose ha criticado el sistema del triángulo, el esquema ofensivo de preferencia de Jackson, quien lo utilizó al máximo durante los seis títulos que ganó como entrenador de los Bulls en la década de los noventas, favoreciendo mejor el uso del 'pick and roll, que en realidad ilustra sus habilidades atacando el interior y creando oportunidades para sus compañeros siempre y cuando las cumplan.

Fue evidente las veces que la defensa de Memphis estuvo convergiendo cerca de Rose. Y cuando no, el nuevo armador de los Knicks le hacia pagar.

“Por lo general cuando ataco, el interior siempre está abierto con los tiradores que tenemos y alguien tiene que cometerse. Si miras alrededor de la liga ahora mismo, están buscando los desajustes y están haciendo que de pronto marques a quien sea”, señaló Rose. “Pero todo comienza con la penetración, que cuando un armador o escolta llega al interior, alguien se presente a defender; hay que pasarle el balón a aquel chico y siempre es un tirador que está allí afuera”.

Noah, su ex compañero de los Bulls que fichó como agente libre con Nueva York este verano, no solamente encabezó a los Knicks con 10 rebotes, sino que también los lideró con siete asistencias, robándole el show en la luminosa cancha del Garden.

El sábado sólo fue por casualidad.

Rose tendrá 80 partidos adicionales para recuperar ese cargo.

“Él es una gran parte de lo que estamos tratando de hacer aquí”, dijo Noah. “En general, creo que compitió duro. Sé que quiere ser mejor. Lo de él es ganar”.