BOSTON - Olvídese de las diferencial de rebotes o de la disparidad de tiro libre, una divertida sesión matutina del Viernes Negro se dio entre los Boston Celtics y los San Antonio Spurs, que, esencialmente se redujo a esto: los veteranos Spurs le dieron una lección de lo que los jóvenes Celtics desean ser.
En el último minuto de un juego de una posesión, Patty Mills salpicó un triple de la esquina con cinco jerseys verdes cementados dentro de la pintura, asegurando efectivamente el triunfo 109-103 de San Antonio sobre los Celtics en el TD Garden.
Los Celtics, ganadores de tres partidos consecutivos y seis de sus ocho anteriores, fueron dominados por los Spurs en parte por su viejo amigo, David Lee, (15 puntos, 12 rebotes).
"Estaba hablando con Isaiah Thomas sobre cómo el entrenador de los Spurs Gregg Popovich sabe lo que quiere conseguir, y esos muchachos lo ejecutan", dijo el delantero de los Celtics, Jae Crowder. "Ellos tienen un montón de playcalls diferentes en el cuarto que les gusta ir, y los conocíamos, pero sólo trataron de separarnos y sólo paso. Es uno de los mejores equipos que he visto."
El juego de los Mills será difícil para Boston durante la sesión del sábado. Mills puso el juego en movimiento con un poco de lob a LaMarcus Aldridge por encima de la línea de tiro libre.
"Tuvimos mala comunicación", dijo Thomas cuando le preguntaron sobre el partido. "Esos son pequeños errores que hicimos que esos tipos de individuos en esa organización van a capitalizar".
Cuando se les preguntó si los equipos se sienten como si tuvieran que ser perfectos en el tramo contra equipos como los Spurs, Thomas dijo, "Sí".
Al Horford dijo: "Cuando uno entra en un ida y vuelta con ellos a principios del último cuarto, simplemente no quieres volver hacer eso en contra de un equipo así. Sentí que salíamos con gran concentración, gran energía, pero su banco cambió el juego."