MILWAUKEE – “¿Que es mejor que ser genial?”, dijo André 3000 mientras se deslizaba alrededor del escenario en el Staples Center, usando lentes oscuros, un traje de striper y un sombrero de papel.
“¡Frío como el hielo!”, respondió uno de los cantantes mientras giraban detrás de él al tiempo que Outkast interpretaba “Hey Ya”, una de las canciones más famosas del momento.
Era la apertura del Juego de Estrellas de 2004 en Los Ángeles. Momentos después, el cantante preguntó a la multitud si estaban listos para conocer a los jugadores; se hizo a un lado para que Michael Redd, vestido con un suéter morado de los Milwaukee Bucks, pudiera ser anunciado para su primera aparición.
Redd jugó 15 minutos y anotó 13 puntos. Un jugador de los Bucks no había sido visto en un Juego de Estrellas desde la sequía de poder más larga en la liga.
En 2004, Giannis Antetokounmpo tenía sólo 9 años y ningún interés en el básquetbol. Cuando vivía en Sepolia, una sección de Atenas, Grecia, jugaba soccer como su padre y su hermano mayor, quien fuera una estrella en Nigeria. No comenzó a jugar basquetbol hasta tres años después, cuando tenía 12.
La historia de Antetokounmpo es tan extravagante como la de los Bucks en su búsqueda. Los Bucks estaban en la necesidad de tener un jugador de franquicia desde que Ray Allen fue enviado a Seattle en 2003 en uno de los movimientos más dañinos en la historia reciente de la NBA. La carrera de Redd fue detenida debido al debilitamiento generado por lesiones lo que lo forzó a un retiro temprano.
Ahora lo tienen. Uno de los puntos de conversación más relevantes entre ejecutivos y exploradores es el crecimiento explosivo que ha tenido Antetokounmpo esta temporada. Desde que el entrenador de los Bucks, Jason Kidd, tomó la intrigante decisión de intalar al "Greek Freak” como base de medio tiempo cerca del final de temporada, su participación en la duela a sorprendido a oponentes y compañeros.
La semana pasada tuvo un juego de 34 puntos contra los Cleveland Cavaliers. El sábado tuvo 10 rebotes, seis asistencias, cinco bloques y dos robos en la victoria contra los Brooklyn Nets. El lunes ganó su segundo Premio al Jugador de la Semana (y perdió en casa contra los San Antonio Spurs a pesar de sus 22 puntos, 11 rebotes, rompiendo con la racha de cuatro juegos ganados).
El martes cumplió 22 años, más joven que otros novatos de la NBA como Buddy Hield y su compañero Malcom Brogdon.
Durante las últimas temporadas, Kidd ha tenido que poner en línea a Antetokounmpo, y ha sido cauteloso con el hecho de que su joven estrella aún tiene mucho que aprender. El lunes, por ejemplo, estaba aislado en una posesión contra Manu Ginóbili y no pudo anotar, en parte porque aún no tiene suficiente confianza en su salto.
Aún así, noche tras noche, Antetokounmpo realiza jugadas asombrosas con su atletismo, tamaño y habilidad floreciente. Promedia 22 puntos, nueve rebotes y seis asistencias más con dos robos y dos bloqueos por juego. También tiene el 52% de porcentaje de tiro. Lo hace mientras juega combinando posiciones de base, alero y pívot en defensa en varias formaciones.
Con base en su potencial, Kidd no puede evitarlo. Sabe que no debería decir en voz alta lo que él y sus entrenadores han estado conversando, pero esta última semana soltó sus labios.
“He estado cerca de algunos de los mejores en el mundo como LeBron James y Dirk Nowitzki”, dijo Kidd refiriéndose al ex Equipo EUA y a los compañeros de los Dallas Mavericks. "¿No sería genial tener a esos dos combinados en un jugador? Podría suceder”.
De todas las cosas que Kidd ha visto en Antetokounmpo, está maravillado con los pases de más. Recientemente encontró al pívot John Henson con un pase picado entre el tráfico que lo llevó a un aro fácil. Ver a alguien de siete pies encontrarse con otra persona de siete pies de altura en un movimiento bajo presión rebotando el balón fuera de la duela dejó a Kidd, uno de los mejores pasadores de todos los tiempos, frotando sus ojos.
“Para ser honesto, no siempre estoy pensando en eso, es sólo instinto”, dijo Antetokounmpo. “Los chicos me preguntan cómo lo hago y les digo que no pienso en ello. Veo cuando es el momento indicado para pasarla y lo hago. Así es como todo ha sido”.
Dejándolo ver como si se tratara un talento natural. Tiene mucho de eso – si no lo hubiera hecho-, los Bucks no lo hubieran hecho su elección 15 en el draft de 2013 siendo una movida que ahora parece genial. Le dieron una extensión de cuatro años por $100 millones de dólares antes de la temporada, lo que parece ser una ganga debido a que fue por varios millones menos del salario máximo. Si ha habido un jugador que se vea como un máximo a la edad de 22, es este atleta. Apuntando hacia su talento puro lo vende mejor. Sus compañeros reportan que Antetokounmpo es activo de ver videos y estudiar el juego. Sólo ha jugado la mitad de su vida, lo cual lo pone detrás de la mayoría de quienes están a su nivel.
Cuando comenzó a tener interés por el juego siendo un adolescente siguiendo los pasos de su hermano mayor, el prospecto de los New York Knicks, Thanasis, comenzó a jugar. Antetokounmpo se encontró a sí mismo ahogado en videos de YouTube donde aparecían Magic Johnson, Scottie Pippen y Allen Iverson. La manera en que realiza los pases, su defensa y su pasión en el juego, puedes ver un poco de eso en todos ellos.
“Sólo quiero hacer grandes jugadas. Ya sea bloquear un tiro, pasándola a un compañero abierto o anotando. Sólo buenas jugadas”, dijo. “Eso es lo que me emociona”.
En la encuesta anual de gerentes generales, siete jugadores recibieron votos en la categoría “mejor jugador para iniciar una franquicia”, una de las áreas favoritas del debate cada año. Karl-Anthony Towns tuvo la mayoría de los votos, una decisión razonable. Antetokounmpo no tuvo ningún voto.
Comúnmente, la segunda encuesta se realiza 12 meses después. Si la votación se realizara hoy, Antetokounmpo saldría a relucir.
Sus primeras seis semanas han sido así de impresionantes. Los Bucks consideran la posibilidad de romper su mala racha en el Juego de Estrellas, y no pueden esperar a ver a donde los lleva el futuro cercano.
“Estamos comenzando a ver a dónde nos puede llevar”, dijo Kidd. “Lo que ha hecho demuestra que puede manejar muchas cosas en este momento. Será tiempo para levantarnos de nuevo y ver cómo lo hace”.