Charles Oakley dijo el jueves que ha tratado de reparar su relación fracturada con James Dolan varias veces, pero que ha sido rechazado por el propietario de los New York Knicks en cada ocasión.
"No quiere reunirse conmigo", dijo Oakley a Mike Wise, de The Undefeated. "El hombre ni siquiera me da la mano".
Oakley ha sido crítico de los Knicks durante los años, específicamente al referirse a la administración de Dolan como propietario a veces. Pero Oakley le dijo a The Undefeated que estaba muy dolido cuando Dolan se negó a estrechar la mano cuando Oakley se le acercó en el Juego de Estrellas de 2014 en Nueva Orleans.
Desde entonces dijo que ha sido una relación aún más acrimoniosa.
"Siempre que voy al Garden ahora, la seguridad ha recibido órdenes de informarle inmediatamente", dijo Oakley. "El año pasado, contra Charlotte, fui a un partido y un grupo de personas de seguridad se me acercó enseguida y me dijo que no fuera a caminar por ahí, que me quedara donde estoy, simplemente no me quiere en el edificio".
Oakley fue arrestado y acusado de tres cargos de agresión tras un altercado en las gradas cerca de Dolan en el Madison Square Garden el miércoles por la noche.
Oakley dijo que estaba particularmente herido por el comunicado del equipo anoche sobre el altercado y su detención. La declaración terminó con "Él es un gran Knick y esperamos que reciba ayuda pronto".
"Justo ahí, atacando a mi carácter de esa manera - no resaltando el momento, sino como si algo más grande estuviera mal conmigo? - No podía creerlo", dijo. "No sé cómo lo haces, no lo sé".
El incidente ocurrió durante una detención del juego cuando Kristaps Porzingis estaba lanzando tiros libres en el primer cuarto contra los visitantes LA Clippers. Una fuente de la policía dijo a ESPN que Oakley había comprado un asiento unas pocas filas detrás de Dolan y estaba haciendo comentarios al dueño de los Knicks, quien eventualmente tenía escolta de seguridad para sacar a Oakley de la arena.
"Lo que pasó fue que yo y cuatro amigos fuimos al juego esta noche, para ver a los Knicks y Clippers. Nos sentamos, tratando de pasar un buen rato. Lo siguiente que sé que me pidieron que saliera del edificio", dijo Oakley en un restaurant de Nueva York después de su liberación de la estación policial del precinto sur del mediano Manhattan poco después de la medianoche. "Les pregunté, '¿Por qué?' Y dijeron: 'Tienes que irte porque alguien te ordenó que te fueras'. Y yo dije: 'He estado aquí cuatro minutos y medio'.
"Soy un fan de los Knicks, jugué aquí hace 10 años, amo a los Knicks, me encanta Nueva York, este es mi corazón, les deseo toda la suerte y el éxito en la cancha, no sé por qué no soy bienvenido en el Garden".
El presidente de los Knicks, Phil Jackson, salió a tratar de calmar a Oakley, quien gritaba a Dolan y le dijo a la seguridad que no iba a moverse mientras lo esposaban fuera del túnel que conducía a la cancha. En un momento, Oakley estaba en el suelo rodeado por la policía y la seguridad del Madison Square Garden.
De acuerdo con el Departamento de Policía de Nueva York, Oakley, de 53 años, golpeó a tres empleados masculinos de MSG - todos los cuales sufrieron heridas leves y rechazaron atención médica en el lugar - mientras lo escoltaban. Fue acusado de tres delitos menores de agresión, todos de tercer grado, y un cargo de intrusión criminal, un delito menor de tercer grado.
Oakley se le dio un boleto de comparesencia y se le pedirá que se presente frente a un juez en una fecha posterior. La fecha de la corte está programada para marzo, dijo una fuente a ESPN.
Oakley jugó para los Knicks desde 1988 hasta 1998, ayudándoles a alcanzar la final de la NBA, pero tiene una mala relación con el equipo debido a sus críticas a Dolan, el presidente de Madison Square Garden.
Ian Begley, Ohm Youngmisuk, de ESPN y The Associated Press contribuyeron a esta nota