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Nadie para a Wagner y Michigan va a la final

SAN ANTONIO – Moe Wagner tuvo una noche monstruosa en el Alamo, se echó el equipo a hombros y los Wolverines de la Universidad de Michigan disputarán el partido de campeonato nacional del basquetbol colegial varonil.

Wagner tuvo que aguantar los embates de la Universidad de Loyola en Chicago desde el principio, cuando la noche en el Alamodome de San Antonio, en la primera semifinal del Final Four se veía oscura por completo para Michigan.

Pero al final, como sucedido la gran mayoría de la temporada, Wagner y el resto de los Wolverines jugaron defensa para derrotar 68-57 a Loyola y avanzar contra el ganador del partido entre las universidades de Kansas y Villanova.

Wagner logró un doble doble desde la primera mitad, que finiquitó con 24 puntos, 15 rebotes y tres robos de bola, para ser de manera indiscutible el Jugador Más Valioso del Partido.

Así se acabó el milagro para Loyola-Chicago y los pronósticos de la Hermana Jean, que serán sólo anécdota en una de las historias más sorpresivas de los últimos tiempos en el Torneo NCAA.

Por los Ramblers, Cameron Krutwig anotó 17 puntos; Clayton Custer, 15, y el guardia de origen dominicano Marques Townes, ocho. Para Michigan, Charles Matthews marcó 17 puntos.

Parecía que la noche sería completa de azul y amarillo, cuando los Wolverines comenzaron rápido con una ventaja de 12-4 en los primeros siete minutos y medio.

Pero ahí reaccionó Gonzaga-Chicago hasta tomar una delantera de 21-17, 23-19 y 25-19 aún en la primera parte.

Michigan estaba falló de puntería y parecía forzar demasiado sus tiros, provocado por la velocidad defensiva de los Ramblers.

El mejor competir de ambos lados de la duela para los Wolverines era Moe Wagner, quien con 2:46 minutos por jugarse ya tenía el doble-doble (11 puntos y 10 rebotes), cuando tres de sus compañeros de la quinteta inicial estaban en blanco en anotaciones.

La primera mitad terminó 29-22 para Loyola-Chicago, que atinó 41 por ciento de sus tiros de campo, 18 rebotes y cuatro robos de balón; a diferencia de Michigan que apenas anotó 29 por ciento de sus disparos desde la duela, 21 tableros e igual cuatro robos.

La segunda mitad fue similar al final de la primera. Gonzaga comenzó rápido y apenas con cinco minutos de juego ya aventajaban por 10 puntos, en lo que mucho tuvo que ver el guardia Clayton Custer con un triple y tres canastas de campo en ese periodo de tiempo.

Pero Michigan metió el acelerador, se acercó a cinco puntos con 8:49 por jugarse, gracias a que Charles Mattews comenzó a cooperar en el marcador, igual que Duncan Robinson con dos triples consecutivos.

Wagner por fin igualó para los Wolverines con un triple a 6:33 del final y 13 segundos después Jordan Poole metió dos tiros libres para irse arriba 49-47.

A partir de ahí, Michigan ya nunca más volteó para atrás y este lunes por la noche intentará ganar su primer campeonato nacional desde el 2013.

Y mucho tuvo que ver la mejora en tiros de campo, que llegó a 42 por ciento de efectividad, 34 rebotes totales y cinco robos más en la parte complementaria.

Con la victoria de este sábado, los Wolverines siguen perfectos en sus últimos siete partidos de semifinales nacionales…